• Claves de la temida endometriosis

    El Autor

    Armando Guerrero Labrador

    Ginecólogo

    En cualquier consulta ginecológica es frecuente presentar síntomas como dolor menstrual, trastornos menstruales, dificultad para quedar gestante y otros problemas de diversa importancia. Muchas de estas pacientes que consultan por estos motivos están afectadas de una enfermedad ginecológica que podríamos considerar como “enigmática”, ya que su etiología sigue sin estar muy clara.

    No hay ningún ginecólogo que no tenga múltiples casos de esta enfermedad, que puede ser leve, a veces asintomática y en otras ocasiones grave con síntomas muy llamativos e invalidantes, así como ser también el motivo de muchos cuadros de esterilidad.

    La endometriosis consiste en la aparición de tejido endometrial fuera del útero (ovarios, ligamentos uterinos, vejiga urinaria, intestino…).

    Existen varios grados de afectación y según la Sociedad Americana de Fertilidad, éstos serían cuatro, de menor a mayor afectación, de órganos pélvicos y extrapélvicos.

    Probablemente sea el motivo de múltiples casos de esterilidad y de dismenorrea, y que a veces, al tratarse de casos leves e iniciales, dificultan su diágnostico.

    En algunos casos, la ecografía no es suficiente para hacer un diagnóstico con exactitud y se deben realizar otros estudios más invasores, como laparoscopias, para diagnosticarla prefectamente. En muchas ocasiones, requieren intervenciones quirúrgicas, unas conservadoras y otras de cirugía radical, dependiendo de la edad de la paciente y el deseo gestacional.

    Existen en muchos países asociaciones de pacientes afectas de endometriosis, dedicadas al conocimiento y divulgación de esta enfermedad que crea problemas de gran importancia médica y social.

    En mi experiencia personal, más del 50% de las pacientes afectadas de esta patología deberán ser intervenidas quirúrgicamente, y a veces, incluso, en varias ocasiones, por lo que también presentarán  patologías derivadas de sus multioperaciones. En fin, enfermedad problemática que a veces tiene un comportamiento invasivo como si fuera neopasia maligna, siendo benigna.

    Muchas, sobre todo con leve afectación, quedan gestantes espontáneamente, debiendo saber que este embarazo mejora el cuadro de endometriosis y otras deberán recurrir a técnicas de reproducción asistida.

    Al final, se debe de pensar en esta enfermedad en cualquier paciente, sobretodo joven, que presente los síntomas descritos anteriormente.

    Hoy en día existen también tratamientos médicos que han ayudado a la mejoría de este cuadro.

    Es conveniente también que la población afectada de estas lesiones sepa que se ha demostrado su carácter hereditario, de tal manera que una madre puede transmitir a su hija esta enfermedad.

    En nuestra ciudad existe el caso reciente de una madre y sus dos hijas con esta patología endometriosica en el que las tres han tenido que ser intervenidas quirúrgicamente al tratarse de lesiones graves y amplias.

    El dato más importante sería el diagnóstico precoz cuando hay afectación pequeña, de bajo volumen, donde los tratamientos y cirugías son más efectivas.

    En fin, enfermedad frecuente, diagnosticable, y con tratamientos eficaces, tanto médicos como quirúrgicos, y con posibilidad alta de conseguir gestaciones, ya que hoy en día tenemos métodos de ayuda a la fertilidad.

    Como última recomendación, indicar que las chicas jóvenes-adolescentes con dismenorrea y trastornos del ciclo, deben consultar con su ginecólogo para descartarla, y en su caso, iniciar tratamientos precoces para evitar su propagación.