• Del Hospital de San Julián al General

    El Autor

    Julio Antonio Virseda Rodríguez

    Jefe del Servicio de Urología del Complejo Hospitalario y Universitario de Albacete y profesor titular de la Facultad de Medicina

    El hospital es un lugar donde los miembros de la comunidad pueden obtener beneficios destinados a devolverles la salud además de ser un centro de enseñanza y de investigación donde se amplían los saberes médicos. A ello se une el aspecto social que cada etapa vivencial confiere a la presencia de la enfermedad  por lo que su historia forma parte de la evolución de la cultura humana.

    La historia de Albacete, desde antes de ser considerada como villa y posteriormente como ciudad, va íntimamente unida a la de su hospital. Se puede considerar que la vida municipal de Albacete comienza en el siglo XIV cuando el 9 de noviembre de 1375 Alfonso de Aragón y Foix I marqués de Villena concede el Privilegio de Villazgo a Albacete en el castillo de Garcimuñoz, con la autorización del rey Enrique II de Castilla, declarando su independencia de la villa de Chinchilla.

    Entre las obligaciones de la nueva villa estaban el cuidado de pobres, enfermos y peregrinos para lo cual el Concejo municipal contribuye al establecimiento de una estructura que hoy podríamos llamar hospital aunque en aquel momento no fuera más que un albergue (“hospitalito”) para acoger a los más necesitados posiblemente por unos pocos días con una precaria asistencia médica del tipo cirujano-sangrador probablemente sin mayor titulación que la experiencia de los prácticos, contando además con un “espitalero” encargado de la organización funcional.

    El nombre de hospital de San Julián aparece mencionado por vez primera en una carta de censo de 1475 en la que se cita a la Cofradía o Hermandad del señor San Julián que “posee unas casas en el Altozano, que habían servido de Hospital”. En la citada carta aparecen los nombres de Andrés García de Alcannavate y de Juan García de Cantos, mayordomos de la citada Cofradía. Como veremos más adelante existen algunas dudas sobre la localización de este “hospitalito” a finales del siglo XV ya que el Altozano actual se conocía como del “Arrabal”.

    El hospital medieval (Edad de la Fe) tiene un carácter especialmente religioso para acoger  a todo aquel que precisaba la ayuda y el cuidado de la caridad cristiana con un sentido benéfico que inspiró las Casas de Dios (Hotel-Dieu) así como a las Casas de Misericordia. Este origen basado en los conceptos cristianos no solo motivó la finalidad, sino también la estructura, organización e incluso el funcionalismo de estos hospitales con una clara dependencia eclesiástica por lo que se levantan y construyen junto a las iglesias, los centro monacales y las catedrales ya que su fin es fundamentalmente religioso y su organización y funcionamiento está estrechamente relacionado con las creencias y las prácticas cristianas. La dirección recae en el “hospitalero” eclesiástico a cuyo cargo se halla encomendada no sólo la salud espiritual de los enfermos sino el control y disciplina de la institución. El “mayordomo” nombrado en las Congregaciones o Cofradías, se encarga de la distribución de los gastos, así como el gobierno de las funciones.

    El nombre de hospital de San Julián deja patente el origen y la orientación que presidió su fundación. Habría que esperar años más tarde al creciente auge de las ciudades y de la burguesía municipal incidiendo en la organización y función hospitalaria que progresivamente es más seglar y dependiente del poder municipal con la dirección y gobierno encomendada a laicos lo cual se acrecentará con el devenir histórico. En el hospital medieval se encuentra presente el principio del bienestar social.

    Por lo expuesto anteriormente es de suponer que el edificio del hospital medieval de San Julián se situara desde el principio en el cerrillo al lado de la parroquia de San Juan y se construyera poco antes de la mitad del siglo XV. La puerta principal se abría en la llamada plaza del Hospital o Plaza Vieja (hoy de la Catedral) contando con dos plantas, pero sólo se utilizaba para enfermos la planta baja, con dos salas, una para hombres y otra para mujeres, con un patio central, oratorio o capilla bajo la advocación de Nuestra señora de la Esperanza. Alguna habitación para los servidores; habría cocina y lavadero para la ropa. A cargo del hospital se encontraba la Cofradía o Hermandad de San Julián dependiendo del Concejo Municipal. El mayordomo-administrador era el párroco de San Juan y el hospitalero y los sanitarios eran contratados por el propio Concejo. Desde los inicios del siglo XVI al enfermo se le cuida por esta condición y no tanto por el antiguo mandato cristiano de la caridad. Se abandona y de forma dispar el carácter teocéntrico de los siglos anteriores del XII al XV.

    Este libro, del doctor Sánchez Ibáñez, recoge toda la historia del Hospital de San Julián.

    Al inicio del siglo XVII el hospital de San Julián está en prácticamente situación de abandono por lo que a petición del Municipio se hacen cargo del hospital los Hermanos de San Antón y se realiza la primera ampliación del antiguo edificio. Es sólo en 1659 cuando se admite al primer médico con título y grado de Bachiller en Medicina expedido por el Protomedicato de Valencia.

    En el siglo XVIII el sostenimiento del hospital seguía dependiendo del Concejo con las rentas y donaciones benéficas como la del capitán Bernabé Cantos en 1721 o la del presbítero y médico Julián Martínez Ibáñez de 1796. Los Hermanos del Divino Pastor, procedentes del hospital de San Clemente, de Cuenca, se hacen cargo del hospital de Albacete y lo denominan Hospital de la Caridad (se mantendría este nombre durante sesenta años) disponiendo de 24 camas y licencia del obispo de Cartagena.

    Ya en esta época las autoridades civiles y sanitarias eran conscientes de que el edificio no reunía las condiciones adecuadas para su misión y en 1792 se planteó la necesidad de trasladar extramuros el hospital siendo el lugar elegido la ermita de san Antón así como la casa contigua, dejando sin uso el cementerio inmediato y vender el antiguo edificio con cuyo producto se podrá construir el nuevo hospital. La idea no consiguió prosperar.

    En 1833 se crea la provincia de Albacete y en 1835 las Juntas Municipales de Beneficencia para auxiliar a sus respectivos Ayuntamientos haciéndose cargo de las cuentas del hospital todavía llamado de la Caridad. En Albacete la primera Junta se nombra en 1837 para la administración del hospital estando constituida por un presidente (el alcalde constitucional), un regidor (concejal del Ayuntamiento), el cura párroco más antiguo, cuatro vecinos ilustrados y caritativos, un médico y un cirujano facultativos del hospital. La Junta propone al Ayuntamiento el nombramiento de personal subalterno: asistente mayor, enfermero, enfermera, cocinero y sangrador.

    En 1862 la reina Isabel II concede el título de ciudad a la hasta entonces villa de Albacete y este mismo año el hospital se denomina Hospital Provincial de San Julián. Un año más tarde la Junta Provincial de Beneficencia nombra al doctor Juan Guspi Obry como Director del Establecimiento hospitalario.

    A partir de 1868 la Diputación Provincial se encarga directamente de la administración del hospital que ya dispone de 88 camas desde la última ampliación que consiguió ganar espacio a expensas del primitivo Teatro que se había puesto en funcionamiento en 1853.

    A finales del siglo XIX, 1893, se pone nuevamente de manifiesto las carencias del hospital que dispone de 110 camas e importantes deficiencias a pesar de los muchos arreglos que venía sufriendo el edificio durante los pasados años. Dos años más tarde, 1895 se encarga un primer proyecto al arquitecto municipal Ramón Casas Massó para buscar un terreno adecuado y Presupuesto para un nuevo Hospital: pero no hubo continuidad y un nuevo Proyecto se encarga al mismo arquitecto en 1901.

    En 1902 se adquiere un solar de 37.770 metros cuadrados, propiedad de don Carlos García Gutiérrez, en las afueras de la ciudad, entre las carreteras de Valencia y Murcia, y un abono de 3.432 pesetas. El lugar elegido cumplía todas las condiciones higiénicas para esta clase de establecimientos. Este segundo Proyecto tenía un importe de 432.681,91 pesetas (2.445,18 pesetas/cama) muy favorable en comparación con otros establecimientos sanitarios de la época. El sistema de construcción adoptado es de pabellones de una sola planta, aislados, y unidos entres sí y con los servicios generales por medio de largos corredores o pasos cubiertos. Las ventanas se orientan al saliente y al poniente, con lo cual se asegura el soleamiento.

    Solo se consiguió efectuar las obras de cimentación para la cerca que ha de rodear al edificio. Hay que esperar a 1917 para poner en marcha un tercer proyecto en el que se reducen de 10 a 6  el número de pabellones que se van a construir.

    El 19 de junio de 1922 con la asistencia de las autoridades principales de la provincia y de la ciudad se inaugura el nuevo hospital de san Julián. El arquitecto del Proyecto, Ramón Casas Massó, que había fallecido poco antes, dejó en su testamento la cantidad de 25.000 pesetas para terminar la capilla y las galerías cubiertas. Este nuevo hospital se mantendría en funcionamiento hasta 1975, es decir durante 53 años.

    Entre 1923 y 1924 se derriba el viejo edificio hospitalario de la Plaza Vieja o del Hospital que ahora se llamaba Plaza del doctor Cristóbal Sánchez y que había sido cedido por la Diputación al Ayuntamiento por 24.000 pesetas. En 1927 se utiliza el solar para construir la Casa de Socorro, el Laboratorio Municipal y el parque de Bomberos.

    En los años siguientes a la inauguración del edificio de 1922 se harían sucesivas reformas y ampliaciones asumiéndose la incapacidad acorde a los nuevos tiempos.

    En 1970 la Diputación Provincial encarga un nuevo Proyecto de modernización del Hospital Provincial de San Julián al arquitecto Antonio Escario. El 1 de mayo de 1971, con la asistencia del presidente, Antonio Gómez Picazo, se coloca la primera piedra para el nuevo edificio.

    En 1975 queda terminada la obra del nuevo hospital con un importe de 361 millones de pesetas.

    Durante los siguientes casi 10 años el edificio apenas puede ser utilizado por la falta de presupuestos a cargo de la Diputación siendo necesario iniciar contactos con la Seguridad Social que dispone de un antiguo hospital público (“Residencia” de la Virgen del Perpetuo Socorro).

    En 1980 se llega acuerdo entre la Diputación Provincial y el Insalud dependiente del Ministerio de Sanidad la cesión gratuita del edificio hospitalario durante 99 años. Entre 1982 y 1983 se termina por derribar lo que quedaba del viejo Hospital de San Julián de Albacete.

    En 1985 se procede al traslado de los enfermos de la vieja Residencia del Perpetuo Socorro al nuevo edificio. Un año más tarde el ministro de sanidad, Ernest Lluch, inaugura oficialmente el actual Hospital General de Albacete. Más tarde se añadiría el término Universitario, pero esta es ya otra historia.

    Anexo: Gran parte de los datos aportados proceden del estudio histórico realizado por el Dr. José Mª Sánchez Ibáñez en su libro “El Hospital de San Julián de Albacete” al que debemos un profundo recuerdo y agradecimiento.

    DENOMINACIONES DEL HOSPITAL DE ALBACETE

    • Hospital de San Julián y Santa Basilisa                                                                 Siglos XIV, XV y XVI
    • Hospital de la Caridad (Hermanos de la Hospitalidad del Divino Pastor)        Siglo XVIII
    • Hospital Militar y Civil (1850)                                                                                Siglo XIX
    • Hospital Provincial de San Julián (1862)                                                              Siglo XIX
    • Hospital Militar del Socorro Rojo (1936)                                                              Siglo XX
    • Hospital General (1980-85)                                                                                   Siglo XX
    • Hospital General y Universitario (1998). Facultad de Medicina                      Siglo XX
    • Complejo Hospitalario y Universitario de Albacete (2007)                               Siglo XX

     

    LAS FECHAS DEL HOSPITAL DE ALBACETE

    1375     Privilegio de Villazgo a Albacete. Concejo Municipal propio.

    1475     Carta de Censo. Cofradía o Hermandad “hospitalaria” de San Julián.

    1792     Primer intento de traslado del hospital a la ermita de San Antón.

    1796    Hospital de la Caridad de los Hermanos del Divino Pastor.

    1862   Título de Ciudad a Albacete. Hospital Provincial de San Julián.

    1895   Primer Proyecto de Ramón Casas Massó para un nuevo hospital.

    1902   Compra de 4 hectáreas en las afueras de la ciudad. Segundo Proyecto de Ramón Casas.

    1917   Tercer Proyecto reducido de Ramón Casas.

    1922   Inauguración del nuevo hospital.

    1970  Proyecto de Antonio Escario para un nuevo hospital.

    1975   Inauguración del nuevo hospital.

    1980   Cesión del edificio al Insalud.

    1986   Inauguración del nuevo hospital.