• Enfermería se lo inventa

    Se trata de un laringoscopio con temporizador que advierte del tiempo máximo para intubar a un paciente. Este invento tan necesario como sencillo se le ocurrió al profesor de la Facultad de Enfermería de Albacete Elías Rovira, y lleva camino de formar parte del día a día de alumnos de grados universitarios, residentes o médicos de Atención Primaria. Y es que, si bien un intensivista o un anestesista intuban con los ojos cerrados, fuera de estas especialidades se pierde la práctica.

    El enfermero Elías Rovira idea un laringoscopio con temporizador que advierte del tiempo máximo para intubar a un paciente

    El invento ya es tal, es decir, hay un prototipo y una patente que Rovira comparte con la Universidad de Castilla-La Mancha, que ha sido la institución que ha asumido los gastos y ha conseguido a los ingenieros capaces de dar forma a la idea. Así, la patente la firman el médico de Urgencias y profesor de la Facultad de Medicina Javier Lucas, el decano de la Facultad de Enfermería, Ángel López, los ingenieros Pedro Carrión y Miguel Martínez Iniesta y el inventor, Elías Rovira.

    Rovira observó en el máster de urgencias y emergencias que organiza todos los años que los alumnos se excedían en los tiempo máximos para intubar. Además, en caso de emergencia, un par de manos se pierden en algo tan nimio como es controlar el tiempo.

    Las luces también guían al sanitario. La luz roja significa que hay que parar, ventilar e intubar.
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    Imagen del invento.

    ¿Cuánto tiempo se puede invertir en intubar?

    El laringoscopio tiene una alarma sonora, programable, que permite a la persona que está intubando saber cuándo tiene que parar, ventilar al paciente, y volver a intentarlo, algo fundamental para que no se produzcan daños cerebrales por falta de oxígeno. Además, como si de un semáforo se tratara, el aparato en cuestión tiene tres luces, verde, naranja y roja, que van orientando al sanitario.

    Rovira ha adelantado que en estos momentos se están haciendo las últimas mejoras técnicas porque ya hay una empresa interesada en comercializar el invento. Y esque, en su opinión, será fundamental para formación y para toda persona que haya perdido la práctica de intubar.

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