• Generación 2017, no hagas daño

    El Autor

    Vicente Calatayud

    Jefe del Servicio de Neurocirugía del Complejo Hospitalario de Albacete

    23 de junio de 2017, una fecha señalada en la mente y corazón de 99 nuevos médicos que reciben el grado en Medicina en la facultad de Albacete, una fecha señalada en un  viejo neurocirujano que recibe la despedida de sus compañeros al tiempo que se crea la Sociedad Castellano-Manchega de Neurocirugía.

    Vosotros llegáis al tiempo que yo me voy. Es ley de vida. Hay que saber retirarse a tiempo para dejar que los jóvenes se incorporen de lleno a la vida laboral.

    Estuve en vuestra graduación, sentí con vosotros la emoción de gritar. Por fin, las malas noches, el no saber si llegaré, se acabó… ¡soy médico!

    Desde mi punto de vista, pensaba en la mañana, en el día anterior, en lo que será dentro de una semana… Se acabó, no volveré a ese hospital en el que he invertido 26 años de mi vida, donde he dejado un legado que han recogido otros compañeros, un servicio que ha permitido la formación de 14 promociones de médicos, vosotros sois la última.

    Durante el tiempo que habéis compartido con nosotros, quizás hayamos caído en el error de arrinconaros en una esquina de quirófano o no dedicaros el tiempo necesario en consultas… en una palabra, en el día a día con vosotros. Desde aquí os pido disculpas si así fue en mi nombre y en el de todos mis compañeros.

    Recuerdo que a muchos de vosotros os pregunté que queríais hacer, si os gustaba la Neurofantasía, el lado oscuro de la fuerza, o, sencillamente, si queríais formar parte del grupo de la leche manchada, ser del selecto grupo de Only Woman, preguntas que se hacían en consultas o mientras habríamos una cabeza o una espalda. Sabéis a qué me refiero y las respuestas que recibí, queda entre nosotros, pero ahora es diferente, ya sois diferentes. Se os termina el tiempo, en breve y en base a esa maravillosa nota del MIR  tendréis que decidir y centraros en la decisión que toméis. No importa cuál sea, para cada uno de vosotros la que toméis será la mejor, pero hay cosas que aun siendo las especialidades distintas se pueden aplicar y quiero recordarlas.

    Siguiendo a Henry Marsh “Do No Harms” (No hagas daño.; Hipócrates de Kos 460d.c.)

    “Every surgeon carries  within himself  a small cemetry, where from to time to time he goes to pray – a place of bitterness of regret, where he must look for a explanation for his failures” (Rene Leriche, La philosohie de la chirurugie 1951).

    Teóricamente no necesitáis traducción, os aconsejo su lectura.

    Lo que no os dijeron en vuestra graduación es que os esperan tiempos difíciles, y no me refiero al examen  MIR,  a fin  de cuentas es para lo que os han preparado en  los años de carrera.

    Ahora una vez pasado el examen y elegida la especialidad, formaréis parte del sistema sanitario nacional de salud, los primeros años seréis residentes, que no mano de obra barata, no os equivoquéis, estáis en periodo de formación, aprended de vuestros adjuntos y exigid vuestra formación, os podéis equivocar, aun podéis hacerlo, tenéis el respaldo del adjunto, aprovecharlo y exigirlo. Sois residentes y lo principal es aprender a no hacer más daño del que ya hace la enfermedad.

    Vais a entrar en el mundo laboral y, dependiendo de  la especialidad, será el mercado, la oferta y la demanda. Os maltratarán con contratos basuras, horas, guardias, meses… Tenéis que estar dispuestos a pelear por lo que consideréis que es vuestro, no esperéis nada de la Administración, jugarán con vosotros dependiendo del color político del momento. No se valorará vuestro esfuerzo, de vosotros dependerá que aceptéis y valoréis lo que habéis hecho, el sacrificio de vuestros padres, lo que espera de vosotros la sociedad de la que formáis parte, no deis lugar a ser mano de obra barata.

    En más de una ocasión pregunté por vuestros colegas podemitas, nunca tuve oportunidad de hablar con ninguno, espero poder hacerlo algún día, hasta entonces espero, si los hay, que sigan fieles a sus ideas y  nos dejen discutirlas y más ahora que se oye que habrá nuevas elecciones.

    Vuestro es el futuro, yo solo puedo hablar en pasado y estoy orgulloso, seguiré haciendo lo que sé, reivindicaré lo justo desde mi nueva posición, pero una batalla, una guerra, no se gana solo, hace falta gente como vosotros, comprometidos y pensando en un futuro que está más cerca de lo que hoy podáis pensar.

    Un abrazo y suerte en vuestra nueva andadura, generación 2017 .