• Las obras del Hospital regresan a los planos

    Ni hospital nuevo ni obras. Las promesas políticas tendrán que esperar un año más porque los Presupuestos de Castilla-La Mancha carecen de partida suficiente para continuar con la reforma del Hospital General Universitario de Albacete que, de momento, se ha quedado en el lavado de cara de la pasarela que conecta con la Facultad de Medicina y en una escalinata, no se ha llegado a abrir ni el aparcamiento. El Gobierno regional insiste en que el presupuesto para la ampliación y reforma del centro sanitario es de 80 millones de euros, pero para 2018 hay contemplados 639.000 euros únicamente para la redacción del proyecto y la dirección facultativa.

    La visita del presidente Emiliano García-Page en junio a unas obras que no han pasado de los aledaños del hospital motivaron la reacción del Colegio de Médicos, que acusó al ejecutivo de mentir mientras las listas de espera no dejan de crecer en un hospital con falta de camas y quirófanos. Partidos políticos como Ciudadanos tampoco han dejado de insistir en el olvido que sufre la sanidad albaceteña, igual que el PP, aunque durante su etapa las obras durmieron el sueño de los justos.

    Y es que esta historia de anuncios, promesas y fotografías viene de lejos. En 2008, el ministro Bernat Soria asistió a la presentación de la reforma y ampliación del Hospital General Universitario de Albacete como una obra faraónica que estaba a la vuelta de la esquina.

    Imagen de la visita política a la pasarela.

    En 2010, se presentó la maqueta y se aseguró que las obras arrancarían en 2011 con 90 millones de euros de presupuesto. En la etapa del Partido Popular, el proyecto se congeló por falta de presupuesto y, en 2016, se volvía a hablar de derruir uno de los edificios anexos para iniciar la obras de inmediato.

    Las máquinas no han entrado al centro, pero la superficie de actuación prevista en el proyecto arquitectónico, que al parecer se volverá a redactar, suponía en tiempos una ampliación de 35.618 metros cuadrados de obra nueva y 22.463 metros cuadrados de reforma en el edificio actual. Es decir, un total de 58.081 metros cuadrados de actuación en superficie hospitalaria. Esto supondría casi duplicar la superficie en metros del actual Hospital General Universitario y actuar en más del 70% de la superficie ya construida.

    El Plan Director inicial contemplaba conservar el edificio matriz del Hospital General, reformándolo íntegramente y en su totalidad. Se mantendrían las actuales habitaciones pero totalmente renovadas y mejoradas. Se construirá un nuevo hospital compuesto de nuevos módulos y edificios ubicados en la parcela liberada tras las demoliciones.

    Hoy, el problema sigue siendo la falta de camas y quirófanos, sin olvidar que los helicópteros del 112 tienen que aterrizar en un descampado del camino a La Pulgosa, cuando deberían hacerlo en la azotea del centro sanitario. Cuando el proyecto sea una realidad, el número de quirófanos aumentaría en un 53%, con 23, así como se duplicaría el número de paritorios. Las camas de hospitalización para pacientes agudos pasarían a 800 mientras que el número de consultas y locales técnicos crecería en un 34%.

    El Plan Director traería consigo nuevas especialidades como Medicina Nuclear, que ahora se resuelve a distancia, un nuevo edificio Materno Infantil, nuevos espacios para consultas de alta resolución, nuevo bloque quirúrgico, nuevo edificio para laboratorios, adecuación y optimización de los hospitales de día así como una nueva área docente, entre otros aspectos de los que se habla desde hace más de una década.

    Para este reto, se necesitaban entre tres y cuatro años y 90 millones de euros. Los años han pasado, pero las diferentes partidas presupuestarias siguen olvidando este proyecto.

    Imagen de archivo de aquella visita del ministro en la que se presentaron, y no era la primera vez, las obras de reforma y ampliación, conocidas como Plan Director.