• Los niños con glomerulonefritis reciben el alta hospitalaria

    Los dos menores del colegio de Pozo Cañada que quedaban ingresados, de los cuatro afectados por glomerulonefritis, ya pueden regresar a sus casas. Ahora sólo queda tomar medidas higiénicas para controlar los contagios, ya que el origen de esta rara afectación en los riñones ha sido una bacteria tan común como que es la que suele provocar las tradicionales anginas.

    El Centro Nacional de Epidemiología ha felicitado a los profesionales sanitarios, así como Sociedad Castellano Manchega de Medicina de Familia y Comunitaria. En total se han tomado muestras a 309 personas en busca de estreptococos, la gran mayoría niños del colegio del municipio, lo que ha dado como resultado 55 positivos, un porcentaje, que, según el director general de Salud Pública, Manuel Tordera,  “se encuentra dentro de la horquilla habitual de población sana que porta la bacteria sin síntomas y que suele rondar de media en el 15%”.

    Asimismo ha destacado que desde que Epidemiología recibió la notificación de los casos, el pasado miércoles 8 de marzo, se activó un protocolo de actuación y el mismo jueves 9 ya se estaban tomando las primeras muestras a los niños de las clases de los cuatro niños que habían ingresado. Estas muestras se terminaron de tomar el lunes y martes de esta semana, completando el total de niños del colegio.

    Desde Sanidad se ha recordado que los niños que ingresaron en el Hospital General Universitario de Albacete lo hicieron a causa de una glomerulonefritis post-estreptocócica, una complicación poco frecuente de estas infecciones.

    En este sentido ha insistido en que las infecciones estreptocócicas del grupo A son bastante frecuentes en la población infantil puesto que se contagia con facilidad a través de los fluidos como la saliva. La mayoría produce enfermedades relativamente leves como infección estreptocócica de la garganta, escarlatina o infecciones de la piel.

    Para prevenir el contagio de la bacteria, desde la Dirección General de Salud Pública se insiste en extremar las medidas preventivas y de higiene, muy similares a las que se ponen en práctica ante infecciones respiratorias o gripe, como lavarse las manos frecuentemente con agua tibia, cubrirse la boca y la nariz cuando se va a estornudar e inmediatamente lavarse las manos o no compartir los cubiertos ni otros utensilios de comer o cocinar.