• Medicina de Familia, el patito feo del MIR

    A cuatro días del cierre de la adjudicación de plazas MIR, más de la mitad de los puestos de Médico de Familia estaban desiertos mientras se agotaban un sinfín de especialidades. Para los futuros médicos internos residentes, la especialidad carece de atractivo, aunque se trata de trabajar en la primera línea. Por este motivo, facultativos y profesores, como el doctor Pedro Tárraga, vicepresidente de la Sociedad Castellanomanchega de Médicos Generales y de Familia, piden que esta asignatura cobre protagonismo en las facultades de Medicina.

    En un artículo publicado por la revista “Journal of Negative & No Positive Results“, Tárraga recuerda que la Atención Primaria es la puerta de entrada y la base del sistema sanitario. Por ello, el número de profesionales que trabajan en este ámbito es alto (28.480 en Atención Primaria en el año 2015 más un importante número en Urgencias y Emergencias), la actividad que desarrollan también (207.903.896 consultas ordinarias y 20.558.361 urgencias médicas en el año 2015 en AP) y es además la especialidad que garantiza la equidad y el acceso a la salud hasta en el hogar más alejado.

    Sin embargo, los mejores no la quieren. Tárraga cree que la causa está en el poco conocimiento que los nuevos médicos tienen de ella, precisamente por la poca presencia de la misma en las facultades de Medicina. De hecho, un 36% de las universidades no tienen ni huella de la Atención Primaria y en otras solo aparece de forma simbólica. Llama la atención que universidades donde mejor implantación tiene la Atención Primaria es donde más se ha elegido esta especialidad, como es el caso de Albacete.

    El vicepresidente de la Sociedad Castellanomanchega de Médicos Generales y de Familia considera que la Administración debe velar para que universidades, conferencias de decanos y Confederación Estatal de Estudiantes den el paso de introducir Medicina de Familia en la facultades.

    Según la Organización Médica Colegial, un 60% de los médicos de familia tiene 50 o más años. Por tanto, Tárraga insiste en que “constituye un reto y además un atractivo profesional saber que los futuros médicos de familia tendrán un mercado laboral casi asegurado . Aunque paradójicamente, también puede influir en la falta de atractivo el conocimiento que los aspirantes tienen sobre las condiciones laborales, profesionales, retributivas que padecen los médicos de Atención Primaria y que son manifiestamente mejorables”.

    El Autor

    Pedro Tárraga López

    Este reportaje se basa en los datos del vicepresidente de la Sociedad Castellanomanchega de Médicos Generales y de Familia