• ¿No podríamos practicar la mesura?

    El Autor

    Eduardo Giménez Benítez

    Farmacéutico

    Aunque meteorológicamente el verano no ha terminado, socialmente y por la fecha, está admitido que el verano se acaba con las vacaciones de las que hemos vuelto con pocas ganas.

    Durante este tiempo hemos maltratado a nuestro cuerpo de una forma generalizada, desde arriba hasta abajo.

    Hemos caminado más de lo normal con calzado inapropiado, hemos tostado nuestra piel de forma desmesurada, nuestros ojos han soportado una luz excesiva, a nuestro pelo lo hemos sometido a aguas saladas, coloradas, aciduladas, algunos, al tener más tiempo libre, han fumado más, hemos sometido a nuestros pulmones al aire acondicionado de los coches y de los supermercados, donde te quedas helado,y por el interior hemos abusado un poquito de esa cerveza, tinto de verano, bebidas más espirituosas, de esas comidas familiares, de amigos…  esas paellas, esas chuletas, el aperitivo… y todo ello ha repercutido en algún kilo de más, hemos maltratado nuestro hígado, riñones, corazón, pero ya se ha acabado, ahora a recuperar, al médico, a mirar el azúcar, colesterol, ácido úrico…

    Ah, no, me equivoco, que después viene la Feria, nuestra Feria, la que acaba de terminar, en la que de nuevo maltratamos nuestros pies con grandes caminatas, a veces hacia ningún sitio, las mujeres con esos taconazos que las estilizan pero que al final les duele todo, nuestros oídos sufren con esas músicas tan altas, vemos a niños de pocos meses soportando el ruido, el polvo…

    Pareciera que jamás hayamos comido, comemos con la familia, amigos, compañeros, pero no cualquier cosa, una buena comida, una buena cena y si vamos a los toros una buena merienda, todo ello acompañado de buenas bebidas con lo que conseguimos volver a machacar a nuestro cuerpo; mención especial para nuestros jóvenes a los que les priva el botellón, algunos de ellos beben hasta que no les quepa más y sus hígados sufren dada su juventud y que sus cuerpos no se han terminado de formar (los premiamos con cinco días de botellón).

    Bueno tras este verano y esta Feria ya nos recuperaremos, pero claro en tres meses estamos en Navidad y otra vez lo mismo, pobre cuerpo ¿no podríamos hacer lo mismo con más mesura?