• Sanidad, solución al deterioro

    El Autor

     Lorenzo Sentenac Merchán

    Médico de Atención Primaria

    Sobre un trasfondo de deterioro continuo y malestar unánime, la gripe, tan “imprevista” como la nieve en invierno, ha hecho crisis de nuevo en nuestra sanidad y en todos sus ámbitos, desde la Atención Primaria y sus urgencias hasta las urgencias hospitalarias, que son los servicios donde esa riada de imprevistos intenta controlarse. Sus profesionales (eso sí está previsto) están acostumbrados a no comer el turrón en casa, sin que por ello dicha costumbre deje de ser injusta: hay profesionales para rotar y permisos que hay que regular con más ecuanimidad y cabeza.

    Dicho esto hay que destacar que nuestros gestores sanitarios al igual que los políticos que les inspiran hablan raro ¿será esperanto? Al caos le llaman perfecta armonía y al sálvese quien pueda objetivos cumplidos. Son así. Por eso en esas fotos que tanto les gusta hacerse nunca sale un sanitario agotado, o una sala de espera –de un servicio de urgencias- a punto de lincharlo. No sería políticamente correcto, incluso desde la perspectiva sindical.

    En estos días las redes han echado humo y especialmente activos han estado los profesionales de la Atención Primaria que según cuentan es el nivel asistencial donde la Sanidad se hunde o se levanta, y dónde desde hace tiempo el malestar abunda y el deterioro se palpa como algo espeso.
    Hablemos del Sescam.

    La atención primaria del Sescam es una “perfecta armonía”, en el lenguaje oficial, un caos en el sentir de los que la trabajan, y desde luego está cada vez más lejos de cumplir sus objetivos. Cómo otros han abundado en diversos motivos y razones que explican esta situación (el mal uso de los servicios de urgencias, la nula educación sanitaria, la no contratación de sustitutos para tanta y tanta “libranza”, las citas postergadas y las listas de espera consiguientes…), yo me voy a centrar en hechos diferentes pero concretos.

    Sin olvidar que mucho de este deterioro tiene que ver con un ataque frontal al Estado del bienestar y los recortes impuestos, en la Atención Primaria del Sescam ocurre lo siguiente:

    Durante el primer semestre de 2017, según algunos cálculos y estimaciones, dejaron de trabajarse en la Gerencia de Atención primaria de Guadalajara (por poner un ejemplo) 65.000 horas de consulta que estaban presupuestadas para trabajarse y que de hecho fueron retribuidas como trabajadas, y todo ello por una mala gestión y peor coordinación de la función de consulta y la función de guardia, y la torticera interpretación de la “libranza” (falsa libranza) posguardia. Súmese el equivalente de horas correspondiente al segundo semestre del año y luego multiplíquese por el número de gerencias de atención primaria del Sescam, y los sucesivos años en que esto ocurre desde el 2008.

    En el 2008 el Sescam sacó una normativa sobre “descansos” en atención primaria que en el espíritu y la letra no vulneraba la legalidad pero que en la práctica lo hace continuamente según todos los indicios, determinando (al gestionar el descanso posguardia como libranza) una jornada incumplida en el número de horas que más arriba se señala y un auténtico derroche económico (de dinero público) al retribuir como trabajado un trabajo que no se trabaja. Como esto deriva de una interpretación “sui generis” de la norma (interpretación que aún no ha sido explicada) y una mala coordinación de las funciones propias de la atención primaria, consulta y guardia, hay que decir que sin cambiar esa norma de 2008 y aplicándola correctamente por la vía de urgencia, desde el minuto cero las consultas que se cierran por ese motivo (y son muchas) no se cerrarían.

    Y es aquí donde entra en juego el modelo de “microguardias” (o modelo navarro) que es el modelo que coordina las consultas y las guardias (más cortas y saludables) en consonancia con la legalidad vigente del Estatuto Marco y la jurisprudencia del Tribunal Supremo, cosa que no ocurre con el modelo actual que vulnera, según todos los indicios, esos referentes legales, determinando un deterioro grave y persistente de nuestra Atención primaria. El modelo es tan simple como que el tramo de guardia hasta las 20:00 horas lo cubre el EAP al finalizar su consulta, y el tramo de guardia desde las 20:00 horas hasta las 8:00 del día siguiente lo cubre personal específico (PEAC), que también son médicos de familia y enfermeros de primaria. Esto permite gestionar los descansos como lo que son, como descansos y no como libranzas, distribuir mejor y de forma más saludable los turnos, y el enorme beneficio para el paciente de abrir la consulta al día siguiente todos los días laborables, tal y como está presupuestado.

    Denunciemos que hay sindicatos que no solo ocultan estos hechos sino que están proponiendo soluciones que los “refuerzan”

    Advirtamos que estos problemas se están analizando y negociando en estos momentos, y denunciemos que hay sindicatos que no solo ocultan estos hechos sino que están proponiendo soluciones que los “refuerzan” y les dan “patente de corso”. Esos sindicatos proponen mantener esa situación de jornada incumplida pero retribuida de algunos Equipos, y abortar una nueva figura laboral de “chico para todo” que “tape” esa irregularidad y haga de la precariedad laboral y del sistema de castas dentro de la Atención primaria la norma. Se trataría de un “sustituto de cabecera” (sustituto eterno) flexible y dócil, sin turnos conocidos de antemano, para moverlo a cualquier zona del área, en cualquier momento, al servicio en definitiva del modelo (en mi opinión, corrupto) que antes se ha descrito.

    Corregir estas irregularidades es urgente pues todo profesional debe cumplir la jornada legal que tiene establecida y abonada, y corregido esto se deberían reforzar los servicios de urgencias de Atención Primaria (PAC) dónde se asisten “simultáneamente” urgencias graves y una consulta a destajo que dura 17 o 24 horas (en algunos PAC 48 horas o 65 horas). Ello exige dotar cómo mínimo de doble equipo (2 médicos y dos enfermeros) a casi todos los PAC no solo para atender esa enorme demanda sino para que cuando se acude a una urgencia externa (en domicilio o en la vía pública) no se abandone, sin ningún personal en el centro, una sala de espera repleta de pacientes.

    Conviene decir que otros servicios de salud no cometen tales irregularidades y optan por el modelo correcto.

    POSDATA: Atención continuada y urgente rural http://www.smnavarra.org/wp-content/uploads/2014/03/Diario-de-Noticias-26-de-febrero-de-2014.-carta-Yurss.pdf

    Eficiencia y costes atención de la continuada en atención primaria https://drive.google.com/file/d/0Bzd2yHnEcZOtcHNEMjBKVHdua0E/view