• Una pulsera para unirlas a todas

    La inspiró la maestra Eloisa Martínez, que falleció el año pasado de cáncer, y hoy se han vendido más de 200 pulseras diseñadas con un único objetivo, recaudar fondos para la investigación contra el triple negativo, un tipo de cáncer de mama que, aunque los científicos ya lo tienen contra las cuerdas, se sigue cobrando vidas.

    Y es que detrás de la investigación hay una lucha contrarreloj para salvar vidas. Ésta es la clave del trabajo de la asociación albaceteña Acepain, que, desde que nació, está buscando recursos económicos para acelerar esta carrera.

    Ignacio Mompó ha entregado un nuevo cheque a Acepain que se destinará al trabajo que lidera el doctor Alberto Ocaña. Este oncólogo es el padre, junto al también investigador Atanasio Pandiella, de un fármaco que detiene la progresión de este cáncer de mama tan agresivo. Pero él desde la Unidad de Investigación del Compleo Hospitalario Universitario de Albacete y Pandiella desde el Centro de Investigación Oncológica de Salamanca no habrían llegado a nada si no es por el apoyo de las asociaciones de pacientes. De hecho, la Asociación ‘Costuras en la piel’ (Acepain) paga con donaciones como la de Joyería Mompó los contratos de dos investigadores que trabajan con Ocaña.

    La historia de la pulsera, que sigue a la venta con el mismo fin con el que se ideó, empezó el 23 de enero de 2015. La maestra Eloisa Martínez enfermó y se apoyó en su familia, en amigos como Nacho Mompó y su mujer, y en Acepain, en especial en Joaqui Alarcón y Marisa Ortega. Fruto de estos vínculos, Alarcón supo de la amistad que unía a Mompó con esta joven, así como que el joyero era además diseñador y gemólogo, por lo que le propuso el diseño de una pulsera para recaudar fondos.

    Con Eloisa como intermediaria e inspiradora, Ignacio Mompó se volcó con la idea. Y el resultado fue una pulsera fabricada para la causa que lleva un lazo símbolo de Acepain con esmalte en fucsia; le acompaña a un lado una perla cultivada en blanco y en las de chico una perla color chocolate, pasadas ambas piezas por un cordón de nailon y cierres en plata de ley. El 25% del precio de venta de estas pulseras se destina a la investigación contra el cáncer, de ahí que el cheque que Mompó ha entregado este lunes ascienda a 851 euros.