• Voluntarios para controlar el delirium en ancianos

    La incidencia ha pasado del 70 al 16 por ciento. El Programa Hospitalario del Mayor “Help”, impartido por 11 voluntarios de la Unión Democrática de Pensionistas (UDP), se está desarrollando en Albacete desde marzo en la Unidad de Agudos de Geriatría del Hospital Perpetuo Socorro con el objeto de reducir la incidencia, duración y severidad del delirium en personas mayores, además de ofrecer compañía estos usuarios.

    Estos voluntarios que han recibido formación teórica y práctica impartida por el Equipo de Geriatría ayudan a crear un entorno amigable, prestando apoyo y empoderamiento a las personas mayores y sus familias durante la fase de hospitalización.

    El delirium se caracteriza por ser una alteración aguda o subaguda del nivel de conciencia, la atención y funciones cognitivas como memoria, lenguaje o pensamiento, y alteraciones perceptivas. En este sentido, el paciente puede mostrar un comportamiento distinto al habitual, encontrarse ausente y decaído, o poco colaborador.

    Se trata de un cuadro frecuente en ancianos sometidos a una situación de hospitalización grave, como la cirugía de cadera, donde puede afectar a la mitad de los pacientes. Es importante destacar que no se trata de una demencia, como el alzhéimer, sino que es un cuadro que dura de unas pocas horas a unos días, y finalmente se vuelve a la situación normal, sin pérdidas cognitivas.

    Este Programa “Help”, implementado a nivel mundial,  pretende a través de la prevención reducir el delirium, bien a través de Protocolos Médicos y de Enfermería establecidos en el Complejo Universitario de Albacete (CHUA), y ofrecer un segundo servicio ofrecido por “la acción del voluntariado”, capacitado para realizar intervenciones sanitarias como orientar y movilizar a estas personas con mayor riesgo de padecer esta patología, con la que pierden funciones físicas, capacidades cognitivas, mayor dependencia o dificultades de comunicación oral y escrita.

    Así lo han puesto de manifiesto el jefe de Servicio de Geriatría del Área Integrada de Albacete, Pedro Abizanda; el director general de Acción Social y Cooperación, Ramón Lara;  y el presidente de la Unión Democrática de Pensionistas de Castilla-La Mancha (UDP), Ramón Munera, durante la presentación de este Programa dirigida a profesionales sanitarios.

    Abizanda ha apuntado que el Programa “Help”, que se desarrolla de lunes a viernes en horario de 17:00 a 19:00 horas, podría extenderse a otros servicios como las Unidades de Críticos Intensivos y Reanimación, o la Unidades de Fractura de Cadera y Ortogeriatría del CHUA, y ha resaltado que de las 31 personas atendidas y seleccionadas, “se ha comprobado en los resultados prelimiares que la incidencia del delirium ha pasado de un 50 y 70 por ciento al 16 por ciento”.

    Promocionar el voluntariado

    Por su parte, el director general de Acción Social y Cooperación, Ramón Lara ha explicado que la labor de la Consejería de Bienestar Social en el Programa “Help” se fundamenta en “promocionar el voluntariado”, y ha recordado que Castilla-La Mancha destina más de 140.000 euros a la labor de estos colectivos y grupos, poniendo como ejemplo los 1.700 voluntarios con los que cuenta la Unión Democrática de Pensionistas (UDP).

    “Lo importante es que el voluntariado llega donde no llegan las administraciones, ni los técnicos”, ha afirmado Lara, que ha recordado las 16.000 atenciones de ayuda a domicilio que se realizan dentro del ámbito de Comunidad Autónoma, gracias a esta labor para evitar la soledad.

    El representante de la Consejería de Bienestar Social que ha avanzado que el Gobierno regional seguirá los resultados que está cosechando el Programa “Help”, también ha manifestado que el voluntario “es un complemento a los recursos sanitarios y sociales que el Ejecutivo autonómico pone en marcha”.

    El director general de Acción Social y Cooperación ha remarcado que un 18 por ciento de la población de Castilla-La Mancha tiene más de 65 años, y ha estimado que en el año 2015, estas personas mayores representarán más del 33 por ciento, pasando de 350.000 habitantes a más de 700.000.