
«Os necesitamos porque quedan un sinfín de preguntas sin responder». Así se dirigía la investigadora Carmen Ramírez, referente en la lucha contra el cáncer y las células madre, a los niños del colegio albacetense San Pablo, que enmudecían mientras escuchaban que para ser científico «uno tiene que estudiar lo que más le guste». Así ha celebrado la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia, tratando de despertar nuevas vocaciones.
La AECC ha celebrado el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia tanto en el Colegio San Pablo como en el Aula Hospitalaria.
«El futuro es un juego de niñas»
Este 11 de febrero los alumnos del Colegio San Pablo han aprendido una lección que no olvidarán. Las protagonistas han sido las niñas, pero todos han asimilado que las mujeres también han dibujado la historia de la ciencia. En la lección de hoy ha aparecido Marie Curie, la física que descubrió el radio y el polonio y recibió el Premio Nobel de Física y Química, pasando por Katherine Johnson, matemática que llevó a la humanidad hasta la Luna o Margarita Salas, que hizo grandes descubrimientos sobre el ADN. Así, gracias a la senda abierta por ellas, hoy las mujeres pueden ser ingenieras, químicas, biólogas, matemáticas, médicas, astrónomas o físicas.
Los alumnos han trabajado bajo el lema “El futuro es un juego de niñas” y han conocido a tres pequeñas científicas: Lente, Suma y futuro, que son un ejemplo del afán explorador, la intuición y la responsabilidad, valores para convencer a los alumnos de hoy de que en un futuro podrán formar parte de un cambio que mejore la vida de las personas. Además, la investigadora Carmen Ramírez ha visitado las clases para dar a conocer la labor científica y despertar así vocaciones.
La AECC celebra el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia despertando vocaciones

