
Un grupo de investigación de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha desarrollado un antifúngico mucho más potente que los convencionales. Lo ha conseguido a partir de compuestos de rutenio cuya eficacia se incrementa exponencialmente al ser irradiados con luz. Este avance podría suponer una solución innovadora frente a la creciente resistencia a los antimicrobianos.

Nueva respuesta frente a las resistencias antimicrobianas
Y es que el abuso de antimicrobianos en Medicina y Veterinaria ha provocado que los microorganismos desarrollen resistencia, haciendo que los tratamientos actuales pierdan eficacia.
Con el propósito de paliar estos efectos adversos, un equipo de investigación de la UCLM, en colaboración con la Universidad de Girona, ha desarrollado una nueva familia de compuestos de rutenio que actúan como potentes antifúngicos.
El grupo de investigación de Química de la Coordinación Aplicada (QuiCAp), liderado por Gema Durá Gracia, ha sintetizado complejos de rutenio-terpiridina que incluyen clotrimazol, un medicamento que es capaz de inhibir el crecimiento o matar a determinados hongos. Estos compuestos, al irradiarse con luz, liberan el clotrimazol y activan el centro metálico de rutenio. El resultado es una actividad antifúngica hasta 141 veces mayor que la del clotrimazol solo.
Así, el estudio, publicado en la revista Journal of Inorganic Biochemistry, ha demostrado la eficacia de estos compuestos frente a tres cepas de hongos: Candida albicans, Rhodotorula mucilaginosa y Zygosaccharomyces rouxii.
Equipo
La profesora Durá Gracia, junto con los investigadores Carlos Gonzalo-Navarro, Antonio José Troyano, Beatriz García-Béjar Bermejo, Juan Ángel Organero, Lucía Santos, Anna Massaguer, Ana María Rodríguez y Blanca R. Manzano, ha destacado la importancia de este hallazgo.
Este trabajo representa un avance significativo en el campo de las ciencias, con potenciales aplicaciones tanto en medicina como en veterinaria.