• Falta una planificación sanitaria real

    El Autor

    Vicente Calatayud

    Jefe del Servicio de Neurocirugía del Complejo Hospitalario de Albacete

    Casi a finales del siglo XX, con más exactitud hasta 1991, se podía cruzar desde Madrid hasta Córdoba y desde Badajoz hasta Valencia sin que existiera un servicio de Neurocirugía, fue entonces cuando comienza la Neurocirugía de Castilla-La Mancha, e inicia su andadura en Albacete. 

    Desde entonces ya han pasado 25 años, las deficiencias sanitarias de aquella época se han ido subsanando, nuestros pacientes ya no tienen que ser trasladados a las comunidades colindantes, excepto cuando algún ejecutivo en el poder así lo decide, o cuando por necesidades asistenciales no puede ser tratado en nuestros centros, siendo entonces trasladados a hospitales de Madrid y en menos ocasiones a Valencia, en nuestro caso.

    Con el transcurso del tiempo aumentaron los Servicios de Neurocirugía en la región, primero Toledo y por ultimo Ciudad Real. Entre los tres servicios atendemos a una población de 1.835.107 habitantes aproximadamente, ya que consideramos que los pacientes de Guadalajara están siendo atendidos en los hospitales de Madrid.

    Pero si nos centramos en nuestra área sanitaria, en Albacete, hay muchos acontecimientos que merecen nuestra atención. La Facultad de Medicina de Albacete se gestó con el esfuerzo de muchos profesionales, pero sobre todo de los médicos del CHUA, que han hecho posible las generaciones de médicos que se han licenciado en esta facultad, creo que ya vamos por la 14 promoción.

    Por encima de intereses de partido

    A lo largo de estos años, hemos echado en falta una planificación  sanitaria real, al igual que hoy, un compromiso de nuestros políticos en el que hablen, actúen por encima de los intereses de los partidos políticos y lo hagan más a favor de los ciudadanos, quizás entonces hubiéramos tenido lo que realmente la provincia e incluso la región necesita, un hospital moderno, con dotación humana y tecnología acorde con la medicina actual.

    Por el contrario, tenemos una proliferación de hospitales infrautilizados donde los profesionales no quieren ir, donde los pacientes… en fin, no es necesario entrar en detalles.

    Algo parecido a la proliferación que tuvimos de aeropuertos que no se utilizan, pero ¿a quién pedimos responsabilidades? Seguimos hablando de listas de espera en todas las especialidades, pero no hay un interés real en poner fin a las mismas.

    Olvidaremos las últimas promesas electorales para Albacete, con ese hospital nuevo que nunca verán  mis ojos en activo, pero tampoco creo que vean el final del plan director. A estas alturas, me conformaría con ver el inicio de ese plan, la demolición del CAS, y de nuevo la conexión de la pasarela con la facultad.

    La falta de una planificación sanitaria para la región, para Castilla-La Mancha, tiene uno de sus mayores exponentes en la segunda facultad de Medicina en Ciudad Real,  esa facultad que existe por criterios políticos. Dividimos los esfuerzos, las posibilidades económicas, las dotaciones, en lugar de potenciar lo que ya tenemos. Por otro lado parce que nuestros políticos, desconocen  que después nuestros facultativos no tienen donde trabajar, y formar un medico, un especialista le cuesta al ciudadano mucho dinero. Facultativos con contratos basura, ya lo dijimos contratos por días, horas, meses, o quizás lleguemos como en Andalucía a contratos nunca al 100% del tiempo laboral.

    El futuro se complica

    Pero no contentos con dos, se rumorea se habla, se comenta, no se desmienten las intenciones de que la ciudad imperial, pueda llegar a tener la tercera Facultad de Medicina. Dicen que cuando el río suena…agua lleva.

    Empezamos a ver la medicina desde el otro lado, comenzamos a decir adiós, pero no por eso dejaremos de ser críticos con las decisiones que se tomen. Desde aquí una vez solicitamos de los que toman decisiones, a los que damos nuestro voto en las urnas, que las tomen en beneficio de los ciudadanos, y no mirando únicamente intereses políticos y de partido.