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La Facultad de Medicina de Albacete bautizará un aula con el nombre del pediatra Antonio Cepillo, alumno de esta institución que alcanzó el grado de «Capitán Optimista» haciendo de la humanización su bandera. El médico, que falleció en abril de un cáncer, se enfrentó al diagnóstico de la enfermedad cuando era residente en el Hospital General Universitario de Albacete. Humilde y cercano, se hizo famoso en el ámbito sanitario a base de pequeños gestos que han sentado escuela. Para que su legado no se pierda, la facultad que lo formó lo tendrá siempre presente.
El aula Antonio Cepillo de la Facultad de Medicina recordará a un alumno que sentó escuela
El gesto de la Facultad de Medicina de Albacete, la que formó a Cepillo, se suma al del Colegio de Médicos, que ha puesto su nombre a una beca, y al de la Fundación Hospital Optimista que ha considerado que el cargo de Capitán Optimista no puede desligarse del apelativo «Antonio Cepillo».
El pediatra y paciente, con mirada y alma de niño, el «flautista» de Los Guachis, sigue presente.
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Hasta siempre, Capitán Optimista
