• Casa de las Monjas, una sorpresa en primavera

    Hemos pasado del invierno al verano, porque Albacete suele olvidarse de la primavera, pero Casa de las Monjas nos ofrece el mejor de los paisajes para este peculiar cambio de estación. Y descubrimos, en una ruta senderista de 12,4 kilómetros, que esta pedanía y sus alrededores atesoran un sinfín de historias y de Historia.

    🥾Andarines: Rigoberto López, Manuel Martínez (guía), Juan Antonio González, Juan Javier Andrés y Dolores Carcelén.

    Casa monjas senderismo

    Cogemos la autovía de Murcia, desde Albacete, en dirección a Tobarra, pero nos desviamos en la salida de Venta Nueva. De ahí, nos dirigimos a Casa de las Monjas, una pedanía con un encanto especial. Vamos los andarines de siempre, pero nos falta una a la que echamos de menos. Además, nos acompaña Juan Antonio González, un colaborador de Diario Sanitario que tenía ganas de ‘redescubrir’ su aldea.

    Empezamos refrescándonos con el agua de un pozo que hay en el punto de partida. La temperatura invita a rellenar las botellas y sumergir las cabezas. Mientras, nuestro cicerone nos cuenta que Casa de las Monjas se debatió entre pertenecer a Albacete o a Pozo Cañada cuando ésta se independizó como pueblo. Al final, los monjeños optaron por convertirse en pedanía de la capital, contando, como así ha sido, con que el cambio tendría sus ventajas, como instalaciones deportivas e infantiles.

    Pero no es la única curiosidad de esta pequeña pedanía familiar. Sus vecinos también consensuaron el nombre de las calles. Y es que, aunque tiene censados a 24 habitantes y en invierno no están ni la mitad de la mitad, en verano Casa de las Monjas es un hervidero de actividad. La época estival estrecha lazos e ideas.

    De todas formas, en esta ocasión, el objetivo era hacer una ruta senderista circular partiendo desde la aldea. En 12,4 kilómetros, hicimos dos subidas, con morra de la Edad del Bronce incluida, disfrutando de un paisaje verde de los que se quedan en la retina. Y es que las últimas lluvias han transformado al campo.

    Con vistas a ’Casa del Cid

    Así, lectores, los invitamos a que sigan la ruta en Wikiloc para que disfruten de las mismas vistas que nosotros, desde la Loma de Cabrerizas hasta el punto geodésico Vecino, pasando por Casa Blanca de los Rioteros. De hecho, tanto nos gustó Casa de las Monjas que regresaremos para ver, no solo dónde pernoctó Rodrigo Díaz de Vivar, sino para subir hasta el punto más alto de la zona, El Picorrón.

    Esperamos ver de nuevo a Encarna, la única vecina que nos encontramos al iniciar la ruta. Nos habló de esa España rural que ahora llaman ‘vacía’ pero que en Casa de las Monjas se llena cada verano. También volveremos a saludar a Eloy Coy, quien nos aclaró que si bien se llama Casa de las Monjas, nadie ha encontrado huellas del paso de las religiosas. Sí nos aconsejó visitar la Casa del Cid, porque, cuenta la leyenda, que por allí pasó el Campeador. Lo dicho, volveremos.

    📍Pinche aquí si quiere consultar la ruta en Wikiloc

    ➡️ Tiene otras rutas en la sección ‘Senderismo’

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