• Certamen literario para una HUCI diferente

    HUCI

    Las unidades de cuidados intensivos viven una revolución. Si la de Albacete mide el ruido y celebra conciertos de música clásica, la de Alcázar de San Juan ha puesto hasta una biblioteca. Ahora la UCI del Hospital Mancha Centro prepara la segunda edición de su concurso de relatos, abierto a que pacientes, familiares y personal sanitario cuente su experiencia en Cuidados Intensivos. La nueva UCI es HUCI.

    Y es que la UCI del hospital público Mancha Centro cambió a HUCI cuando la enfermera Virginia Sotos conoció la cruzada del intensivista Gabi Heras. Seguía en las redes sociales el movimiento de este médico por humanizar la sanidad cuando tuvo el caso de un paciente muy joven. Ambas situaciones coincidieron y la empujaron a mover ficha. Soto convocó una reunión de sus compañeros, les expuso sus deseos y motivos para humanizar la UCI y hoy forman el grupo 26 profesionales de todas las categorías y especialidades.

    El Grupo HUCI se puso a trabajar desde el primer día. Creó una biblioteca; contrató la compra diaria de un periódico y blindó la intimidad de cada uno de las camas. Además, estableció que un auxiliar hablara primero con los familiares para pedirles el teléfono, indicarles dónde pueden esperar e informarles del tiempo que pasará hasta que puedan hablar con el médico y ver a su familiar. El grupo tomó esta primera medida porque tenía comprobado que la incertidumbre era la circunstancia que más ansiedad generaba entre los familiares.

    El Grupo HUCI sigue la senda del intensivista Gabi Heras

    Acto seguido, la nueva HUCI puso un interfono para que los familiares pudiesen contactar en cualquier momento con el interior. Así, para cuestiones tan cotidianas como llevar las gafas del paciente, la familia no tenía que esperar a las visitas o golpear la puerta. Ahora, la comunicación es directa las 24 horas del día.

    El Mancha Centro también está pendiente de solventar una circunstancia de la que ha advertido este grupo. La sala de espera de cuidados intensivos y de paritorios están pegadas, lo que genera demasiados contrastes. De momento, el grupo ha conseguido habilitar una pequeña habitación de duelo, con sillones e infusiones, donde los familiares de los pacientes más graves tienen más intimidad.

    Así, conforme pasa el tiempo, el Grupo HUCI va solventando pequeños detalles en beneficio de sus pacientes, como comprar relojes, ya que habían detectado que, como no tenían donde ver la hora, los enfermos se desorientaban.

    Entre otros reconocimientos, este grupo tiene el Premio Pablo Ráez a la Humanización. Su objetivo ahora es impulsar el certamen de relatos.

    En la página de Facebook del Grupo HUCI se pueden consultar las bases del certamen.