• ¿A la cuarta irá la vencida?

    La tercera vez que avisaron a Isabel Guerrero para operarse en el Hospital de Hellín suspendieron la cirugía cuando ya tenía la vía puesta

    La letureña Isabel Guerrero Álvarez tiene previsto ingresar en el Hospital de Hellín este 19 de julio por la tarde. Es la cuarta vez que la avisan para ponerle una prótesis de cadera y acabar con el dolor que la tortura desde hace años. La última vez llegó a ingresar; le pusieron la vía; cenó y, acto seguido, le informaron de que se suspendía la intervención.

    cirugía Hospital Hellín

    Tiene el preoperatorio desde el mes de febrero y se ha hecho la PCR para descartar que tuviese COVID en tres ocasiones. Pero Isabel Guerrero no ha conseguido pasar por quirófano. Comentaba a Diario Sanitario entre lágrimas que camina cojeando por el dolor. Sin embargo, lo que realmente le duele es la impotencia de que la dejen a las puertas del quirófano. También lo siente por sus dos hijos, que han hecho el viaje en balde y han cambiado billetes perdiendo dinero por los cambios de decisión en el Hospital de Hellín.

    Comenta Isabel, que ahora vive en la Abejuela, una pintoresca pedanía de Letur (Albacete), que antes de cumplir los 14 años ya trabajaba. Ha pasado media vida empleada en carnicerías en Cataluña. La vida de esta emigrante castellanomanchega no ha sido fácil, ya que se quedó viuda con 49 años. Además, a los 59 años lo dejó todo para regresar a su tierra y cuidar de su madre.

    Ahora que tiene 66 años, Isabel Guerrero quiere una vida tranquila. Sin embargo, en 2020, tuvo la mala suerte de caerse y perder el conocimiento. Desde entonces, sabía que necesitaba una prótesis de cadera para acabar con el dolor.

    Esta paciente no se queja de la espera, pero sí de mentalizarse en tres ocasiones de que entraba en quirófano para después regresar a su casa.

    A las 11 de la noche, sin operar, le dieron el alta

    El 9 de julio fue la última vez. Hecha la prueba del COVID, la ingresaron el 10 de julio, 24 horas después del aviso. Estaba previsto que la sacaran de la habitación, rumbo al quirófano, a las 8 de la mañana. Así que le cogieron la vía e incluso le dieron la cena. Ella comentó entonces a sus familiares que, como se encontraba bien, que guardaran fuerzas, que se fueran a casa hasta la mañana siguiente. Sin embargo, para su sorpresa, pasadas las once de la noche, le informaron de que se suspendía la operación y le daban el alta. Se negó a llamar a la Abejuela para que alguien condujera de noche, así que regresó a su casa en ambulancia.

    Diez días después de la tercera suspensión, este 19 de julio, Isabel tiene cita de nuevo para operarse en el Hospital de Hellín, donde tienen que ponerle esa prótesis que acabe con el dolor. ¿A la cuarta irá la vencida?

    • El 21 de julio, la paciente comunicaba a Diario Sanitario que ya la habían operado. Agradecía la atención, el cariño y la profesionalidad de todo el personal sanitario del Hospital de Hellín.

    ▶️Aquí puede consultar la sección ‘Buzón del Lector’

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