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La sanitaria, no se considerará, de momento, una profesión de riesgo, pero el Consejo de Ministros ha dado el paso para que el Ministerio de Trabajo considere el COVID-19 enfermedad profesional en sanitarios.
- Los colegios de Enfermería aplauden el carácter retroactivo de la norma.
- Los colegios de médicos se felicitan por diez meses de trabajo.
- CESM pide que la sanitaria se considere profesión “de riesgo”.
- CSIF reivindica que incluya a todos los profesionales.
- UGT celebra que la cobertura vaya más allá de los cinco años posteriores al contagio.
De accidente de trabajo a enfermedad profesional
Así, la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ha acogido con satisfacción que el Consejo de Ministros haya aprobado el contagio por COVID-19 en profesionales sanitarios como enfermedad profesional.
Se trata de una reivindicación que se ha pedido insistentemente desde el inicio de la pandemia, alegando que no era suficiente la consideración como accidente de trabajo, una reclamación a la que posteriormente se fueron sumando diferentes organizaciones.
La situación de desprotección en la que quedaban los profesionales sanitarios fue llevada además a instituciones como el Defensor del Pueblo y trasladadas al director general de Ordenación Profesional, quien mostró su consonancia con la petición médica asegurando que lo trasladaría al Ministerio de Trabajo, competente para articular el cambio normativo.
Sin embargo, el principal sindicato médico lamenta que no se haya facilitado el mismo tratamiento para la consideración de profesión de riesgo para los médicos, otra de las reivindicaciones que desde el principio de la pandemia ha puesto sobre la mesa la confederación.
Satisfacción entre los colegios profesionales
Así, los colegios de Enfermería el carácter retroactivo de la norma que reconoce el COVID-19 como enfermedad profesional al incluir a las más de 80.000 enfermeras que ya se han contagiado.
Asimismo, el Consejo General de Colegios de Médicos celebra el decreto aprobado hoy en el Consejo de Ministros que establece la categoría de enfermedad profesional en aquellos profesionales sanitarios que se contagien de COVID-19, una reivindicación que llega tras diez meses de trabajo de toda la profesión médica.
CSIF reivindica que incluya a todos los profesionales
A la espera de conocer el detalle de la norma, desde CSIF advierten que estarán vigilantes para que esta medida se reconozca al conjunto del personal que trabaja en la Sanidad, incluido personal administrativo, de limpieza, celadores, entre otros.
Además, se continuará reivindicando que este reconocimiento se amplíe al conjunto de las personas trabajadoras que por su actividad laboral puedan estar expuestas al virus, tal y como marca el Real Decreto sobre enfermedades profesionales (personal expuesto a agentes biológicos), como trabajadores de laboratorios, clínicas dentales, personal sociosanitario, ambulancias o centros penitenciarios.
UGT celebra que la cobertura vaya más allá de los cinco años posteriores al contagio
Tras meses considerándose estas bajas como enfermedad común, desde mayo de 2020 se pasó a considerar contingencia profesional derivada de accidente de trabajo.
A juicio de UGT, el hecho de que se declare ahora como enfermedad profesional para los sanitarios implica una mayor protección para este colectivo, entre otras cosas demuestra que el origen es de carácter laboral y otorga beneficios a nivel de compensación de seguimiento, rehabilitación, tratamiento de secuelas y enfermedades secundarias; ya que cubre toda la vida laboral, pues en el caso de contingencia profesional derivada de accidente de trabajo, tipificada hasta ahora, únicamente cubría durante los cinco años posteriores al contagio.
