
El sindicato CSIF ha decidido iniciar una campaña de movilizaciones en todas las provincias españolas el próximo 28 de abril dirigida al conjunto de profesiones del Sistema Nacional de Salud (SNS). Se trata de una respuesta ante la decepción con la ministra de Sanidad, Mónica García.

El sindicato advierte de que las movilizaciones se irán endureciendo de manera progresiva si el Ministerio no reacciona. Además, CSIF considera que las mejoras en las condiciones laborales deben de ir acompañadas de un plan para la mejora de la calidad asistencial. También exige más financiación y refuerzo de las plantillas. Tras la pandemia, el SNS se ha visto resentido y afronta una crisis sin precedentes que ponen en peligro la sostenibilidad del modelo.
Castilla-La Mancha
Asimismo, CSIF Sanidad Castilla-La Mancha también denuncia que los profesionales del Sescam sufren peores condiciones que otros servicios de salud. No sólo padecen la congelación de la carrera profesional, paralizada desde 2012, sino que persisten las restricciones en la incorporación de personal. Continúan sin cubrirse la totalidad de las bajas, vacantes, vacaciones o permisos, lo que genera graves problemas. Asimismo, hasta el 50,8% de la plantilla del Sescam tiene una relación contractual temporal.
Para CSIF, hay ocho líneas rojas que motivarán las reacciones a partir del 28 de abril:
- Adecuada clasificación del nivel de las diferentes profesiones de la Sanidad con la debida concreción de retribución económica específica y básica.
- Aplicación de lo dispuesto en el art. 76 del TREBEP para técnicos medios y superiores al grupo C y B.
- Jubilación voluntaria parcial y anticipada y por coeficientes reductores para el personal del Sistema Nacional de Salud.
- Reducción de las horas diarias de guardias, sin merma retributiva, y reducción de la temporalidad.
- Recuperación de la carrera profesional en el Sescam para todas las categorías y equiparación salarial en el conjunto de las comunidades autónomas.
- Fin de las restricciones en las contrataciones en el Sescam.
- Recuperación de la estructura salarial previa a la bajada de sueldo de 2010 con el cobro de la paga extra íntegra.
- Revisar el régimen de incompatibilidades para evitar la fuga a la sanidad privada.
Otro punto de vista.
CSIF: LOBOS CON PIEL DE CORDERO.
Ya chirría un poco el titulo de la noticia, que asocia “movilizaciones” con un sindicato paralizado y arcaico. Al parecer estos sindicales, se sienten decepcionadas con la Sra. Ministra de Sanidad, en lo que, curiosamente, coinciden con los casposos galenos. Estos últimos, incluso en este Diario Sanitario, consideraban a esta una traidora, por entender que mermaba y ponía en peligro sus injustas prebendas y regalías.
Y el clan mediquíl, que “no da una puntada sin hilo”, quiere inmiscuir a otros sindicatos, supuestamente ajenos a la CESM, en su causa por un caciquil estatuto propio.
En la verborrea sindical-verbenera de CSIF, no dudan en hablar de un “plan de mejora de la calidad asistencial”, como si realmente, a la luz de los hechos, eso les importara algo. Exigen “más financiación y refuerzo de las plantillas”; lo que no nos aclaran es si consideran igual a las dotaciones profesionales que nos sitúan en los primeros puestos de los países de Europa, o a las de aquellos en las que nos encontramos en las ratios finales. Por desconocer, hasta ignoran que mientras a algunos grupos profesionales se les obliga (ilegalmente) a trabajar un tiempo gratis en cada una de su jornadas (solape), otros se les consiente no cumplir su horario ni un solo día del año.
Estoy de acuerdo en que la pasada pandemia a traído un caos en el ámbito de la atención que llevan a cabo los médicos. Pero considero que el resto de grupos profesionales sigue con un rendimiento normalizado.
En sus oscuras maniobras sindicales nos sacan a relucir, a estas alturas, la congelación de la carrera profesional; las restricciones de la incorporación de personal; que nos e cubran la totalidad de las bajas, vacantes, permisos… ¡Como si esto se hubiera producido de la noche a la mañana!
Pero son las que denominan “líneas rojas” quienes delatan sus oscuros fines y el servilismo médico que persiguen. Hablan primeramente de la “adecuada clasificación” de las profesiones. Pero, ¿de que profesiones nos hablan?, ¿De las que en los últimos años se les ha elevado su nivel de estudios a grado universitario, o han llevado a cabo un aumento de años en formación académica?. ¿Podrían explicarnos que piensan de que la administración fije varias varas de medir en colectivos con un mismo nivel académico?.
Y se les sigue viendo el plumero: “reducción de las horas diarias de guardia, sin merma retributiva”. O lo que es lo mismo puro caciquismo administrativo, para beneficiar siempre a los mismos. ¡Valientes caraduras!
Que traten de justificar las incompatibilidades en los médicos, que son realmente a quienes incumben, no deja de ser otra fantasmada del CSIF. ¿Les parece bien que muchos de nuestros galenos rindan el doble, por la tarde en los chiringuitos privados, que por la mañana?
Pueden adornar su discurso con todas las perogrulladas habidas y por haber, pero no se equivoquen, cada vez van a conseguir engañar a menos trabajadores.