• Alianza para sumar donantes de sangre entre los escolares

    La Fundación Globalcaja y la Hermandad de Donantes de Sangre editan un cuento que llegará a 50 colegios de la provincia de Albacete

    No podrán donar sangre hasta que cumplan los 18 años y pesen más de 50 kilos, pero concienciar desde el colegio garantiza una necesaria cantera. Así, la Hermandad de Donantes de Sangre y la Fundación Globalcaja han editado el cuento ‘Albacete, provincia de donantes’, que llegará a 50 colegios para animar a la lectura y promocionar la donación de sangre.

    La Fundación Globalcaja y la Hermandad de Donantes de Sangre editan un cuento que llegará a 50 colegios de la provincia de Albacete
    Un momento de la presentación del cuento. De izquierda a derecha, Pilar López, representante de la Delegación de Educación; Herminio Molina, presidente de la Fundación Globalcaja; Jesús Igualada, presidente de la Hermandad de Donantes, y Blanca Hernández, delegada provincial de Sanidad.
    La Fundación Globalcaja y la Hermandad de Donantes de Sangre editan un cuento que llegará a 50 colegios de la provincia de Albacete

    El cuento ‘Albacete, provincia de donantes’ empieza con 2.000 ejemplares

    Y es que, si bien Albacete es una provincia de donantes de sangre, como titula este cuento, el presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre de Albacete, el enfermero Jesús Igualada, ha reconocido que teme por ese necesario relevo generacional, ya que la bajada de la natalidad y el envejecimiento de la población son un hecho.

    El cuento, del que en principio se editarán 2.000 ejemplares, es obra del escritor Antonio de Benito, que ha contado con las coloridas ilustraciones de Patricia Méndez. Los 2.000 primeros ejemplares llegarán a 50 colegios de toda la provincia, concretamente a los alumnos de 8 y 9 años.

    Con esta fórmula, la Hermandad de Donantes de Sangre pretende ‘fichar’ a esa cantera que garantice que la sangre, como hasta ahora, nunca falte en los hospitales. De hecho, Albacete cuenta con más de 73.000 donantes gracias a los cuales funcionan los quirófanos o se tratan un sinfín de enfermedades.

    Aunque en la actualidad la sangre está garantizada gracias a la labor altruista de los donantes, ésta no se puede fabricar, de ahí la importancia de bajar la guardia en la promoción de la donación.

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