Las enfermeras denuncian “deterioro” de la sanidad pública

Enfermeras, fisioterapeutas, paciente y ciudadanos se han concentrado hoy para denunciar el “deterioro” de la sanidad pública. Lo han hecho frente a la sede del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam). Creen que las administraciones públicas y los partidos políticos están traicionando “el interés general de mejorar nuestra sanidad pública”.

“No están cumpliendo ni uno solo de los compromisos”

Convocados por el Sindicato de Enfermería, SATSE, la nueva protesta ha estado protagonizada por enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas. Pero también por usuarios, estudiantes de Enfermería y Fisioterapia. Así como familiares de profesionales y otros colectivos. Todos han querido manifestar su “absoluto rechazo a la situación de progresivo abandono y precariedad que sufre nuestro sistema sanitario tras dos años de pandemia”. Ha tenido lugar en Toledo.

Han criticado que ahora las administraciones públicas y partidos “no están cumpliendo ni uno solo de los compromisos”. Compromisos realizados “para que que se cuente con los recursos y medios necesarios para ofrecer una atención sanitaria digna, segura y de calidad”, como han recordado.

Han exigido “respeto y dignidad”. Y han protestado por la política de “brazos cruzados” de la Consejería de Sanidad que está cronificando los problemas y deficiencias que el Sescam ya tenía antes de la pandemia. Problemas que han advertido que “se han agravado (listas de espera, saturación, colapsos, sobrecarga y tensión asistencial…) perjudicando a los pacientes, ciudadanos y profesionales”.

Denuncian, por otro lado, el “vergonzoso” bloqueo que sufre desde hace un año y tres meses la tramitación de la Ley de Seguridad del Paciente en el Congreso de los Diputados. Algo que “está impidiendo que la seguridad asistencial esté siempre garantizada en cualquier centro sanitario y sociosanitario gracias a una asignación máxima de pacientes por enfermera/o en condiciones de igualdad, calidad y seguridad”.

Alta temporalidad

Han denunciado que siguen sufriendo, en uno de cada tres casos, una situación laboral de temporalidad y precariedad.

“Mientras que al conjunto de la ciudadanía le sigue preocupando, y mucho, la situación de nuestra sanidad, como reflejan las últimas encuestas, a los responsables públicos y políticos ya no les importa nada”, lamentaban.