• Los nuevos médicos piden que no se abran más facultades

    La Facultad de Medicina de Albacete graduaba a 114 médicos este viernes, facultativos que necesitarán superar el examen MIR y especializarse para poder ejercer en la sanidad pública. Sin embargo, la mitad de los médicos españoles se queda sin plaza de formación sanitaria especializada. Así, los nuevos galenos pedían en su graduación más plazas MIR y centros mejor dotados en lugar de nuevas facultades. Apelaban a la medicina de Familia, a la humanización de la Sanidad y a la importancia de la Salud Mental.

    discurso medicina Albacete 2021

    Los médicos Daniel Maroto Navas y Lucía Jiménez Ochando, recién egresados, se dirigían a los asistentes a la XVIII Promoción de la Facultad de Medicina después de seis años de grado en los que incluso se vieron sorprendidos por una pandemia sin precedentes. En este contexto, insistieron en la importancia de la Salud Mental, tanto para los pacientes como para los estudiantes y los propios médicos, así como recordaron la importancia de la medicina de Familia.

    Los servicios de salud advierten de que les faltan médicos, pero ellos recordaron que el problema no está tanto en el número de egresados como en la falta de plazas MIR. Si todos los graduados accedieran a una plaza de formación sanitaria especializada se acabarían problemas como la falta de relevo generacional en Atención Primaria.

    Los nuevos médicos fueron los protagonistas con un discurso valiente y reivindicativo.

    discurso medicina Albacete 2021

    Discurso de los médicos de la XVIII Promoción

    El Autor

    Daniel Maroto Navas y Lucía Jiménez Ochando

    Médicos de la XVIII Promoción de la Facultad de Medicina de Albacete

    Buenas tardes y bienvenidos una vez más a todos los que habéis decidido acompañarnos no solo hoy, sino durante todos estos años. Somos Lucía y Dani, y para nosotros tiene un gran significado poder ser hoy la voz de todos nuestros compañeros. Nuestras primeras palabras van dirigidas a los profesores galardonados.

    Algunos llegasteis a nuestras vidas aquel septiembre de 2015, otros, sin embargo, habéis ido llegando años después. Pero si hoy estáis aquí tened claro que no es sólo por vuestras destrezas docentes o labor como sanitarios, sino por vuestra humanidad y por los valores que nos habéis demostrado, que se quedan con nosotros para siempre.

    Esperamos que con el paso del tiempo, no perdáis la ilusión ni las ganas de despertar en las personas la necesidad de querer aprender y, sobretodo, que sigáis demostrándoles a vuestros futuros alumnos, que con empeño y determinación, se puede volar alto a pesar del vértigo.

    También queremos hacer una mención especial al nuevo equipo decanal, así como al nuevo rectorado. Os deseamos la mayor de las suertes en esta nueva etapa que comienza y os pedimos, que todos los cambios que acontezcan tengan como protagonista, el diálogo y la escucha activa con los alumnos y alumnas, ya que son ellos el eje central en torno al que gira el sentido de la comunidad universitaria. Silvia, Miriam y Eva, estamos profundamente orgullosos de que tres mujeres como vosotras seáis la cara visible de esta facultad.

    Vuestra dedicación y cariño han sido incalculables desde el principio. Por ello, no queríamos perder la oportunidad de daros las gracias por arriesgaros a escribir esta aventura con el único objetivo de mejorar la que ha sido nuestra casa durante seis años. Os desearíamos suerte, pero creemos en vosotras. Pero sin duda, las palabras más especiales van dirigidas a nuestros amigos, pero tampoco podemos olvidarnos de nuestros compañeros de la promoción anterior, quienes por motivo de la pandemia no pudieron cerrar esta etapa de la misma forma que lo hacemos nosotros hoy.

    discurso medicina Albacete 2021
    Fotografías: Josema Moreno.

    “Hay almas a las que uno tiene ganas de asomarse como a una ventana llena de sol”

    Decía Federico García Lorca que “hay almas a las que uno tiene ganas de asomarse como a una ventana llena de sol”. Habéis sido vosotros quienes nos habéis acompañado a lo largo de este viaje que no termina hoy.

    Muchos habéis creído en nosotros en los momentos en los que seguíamos buscándonos y queríamos agradeceros que nos hayáis brindado la oportunidad de estar aquí hoy.

    Nuestro pequeño océano, ya no podemos ganarle más tiempo al tiempo. Llegasteis cargados de verdades que traspasaban lo desconocido hasta hacerlo tan familiar que podía doler. Y ahora se van las maletas repletas de recuerdos para empezar a construir un nuevo comienzo lejos de esta ciudad que, sin ser nada, nos ha dado tanto. Vuelve el miedo de no querernos lejos.

    Terminaremos abrazados en la entrada de una estación, con la piel de gallina, el miedo en el cuerpo y lágrimas en los ojos.

    Llega el momento del cuerpo a tierra, de ser bala y disparo

    Llega el momento del cuerpo a tierra, de ser bala y disparo. Porque nadie puede salvarnos de nuestra propia vida. Algún día volveremos a sumar, pero ya no desde cero, porque lo que es de verdad no acaba nunca. A veces no sabemos muy bien quién somos, pero sí de quién queremos seguir siendo. Creemos que todos estaremos de acuerdo en que esta historia no nos pertenece solo a nosotros.

    Por ello, no podíamos olvidarnos de esas personas que han estado ahí, día tras día, soplándole al viento cuando nuestras alas no podían más. Siendo el empujón que necesitábamos cuando la ilusión flaqueaba y nuestros pilares se tambaleaban. Nos estamos refiriendo a vosotros, a los padres y madres que habéis estado con nosotros desde el principio y también a aquellos que de alguna manera, siempre estarán.

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    Nuestras familias

    Porque sin nuestras familias, estar hoy aquí no sería posible. Sabemos que no hemos podido tener mayor suerte. Gracias por los abrazos, los besos y también por las lágrimas. Por todas las veces que tocamos fondo y bajasteis con nosotros a coger impulso.

    Gracias por no soltarnos nunca, por acompañarnos en cada paso y dibujar con nosotros el camino entero.

    Gracias por bailar con nuestras inseguridades, por enseñarnos a dormir con nuestros miedos. Por las noches en vela, el sacrificio constante y por habernos salvado del frío hasta hoy.

    Sois, sin duda, el mejor abrazo en el que la vida nos ha dejado crecer. Gracias por querernos como solo vosotros sabéis hacerlo, esto es tan nuestro como vuestro.

    No siempre nos encontramos con instituciones que velan por nosotros

    Llegados a este punto, no podemos olvidar el papel que la medicina y sus sanitarios tienen en la sociedad. A pesar de ello, no siempre nos encontramos con instituciones que velan por nosotros. Por ello, creemos que hoy tenemos el deber de dar voz a todos esos aspectos que, con el tiempo, se han hecho invisibles. Ejemplos de ello lo encontraríamos en la problemática con la elección de plazas de FSE y la proliferación indiscriminada de nuevas facultades de medicina, que amenazan el futuro de miles de estudiantes.

    Abrir una nueva facultad de medicina implica que más estudiantes puedan acceder a la carrera, pero no que estos puedan terminar su formación, ya que actualmente es obligatorio hacer el examen MIR para poder obtener una plaza de formación especializada.

    España es el segundo país del mundo con más facultades de Medicina

    ¿No sería más eficiente dotar a las existentes en lugar de generar otras?

    España es el 2º país del mundo con más facultades de medicina, duplicando la tasa recomendada por la OMS. ¿De verdad necesitamos más? En nuestro país no hay necesidad de nuevas facultades de medicina, sino que su apertura responde a otros intereses fundamentalmente políticos con el objetivo de generar una falsa sensación de prestigio a costa de poner en riesgo el futuro de la demografía médica y el desperdicio de los recursos actuales de los que disponemos. ¿No sería más eficiente dotar a las existentes en lugar de generar otras y aumentar el embudo si tenemos en cuenta la cantidad de plazas MIR que se ofertan actualmente?

    Que se aumenten las plazas MIR

    Por ello, pedimos que no se abran más facultades, que se cuide las que tenemos, que se mejore la situación del profesorado clínico y que, en la medida de lo posible, se aumenten las plazas MIR. Este último año más que nunca, hemos sido testigos de la importancia que supone para toda la población tener una sanidad pública, accesible y universal que garantice el acceso de cualquier persona, independientemente de su nivel adquisitivo, raza o religión. Pese a ello, en los últimos años venimos notando cómo las condiciones y exigencias de los sanitarios no son tenidas en cuenta por quienes se supone, que deberían cuidarlas.

    Medicina de Familia

    Y cabe destacar, que la base de nuestro sistema nacional de salud no es otra que la Medicina de Familia y Comunitaria. Porque es la atención primaria quien sustenta el acceso universal a unos cuidados sanitarios básicos, contando con una elevada presión asistencial y, recibiendo paradójicamente, menos recursos que la atención especializada. Consideramos que como personas y, en ocasiones, también como pacientes, todos hemos experimentado la importancia del acompañamiento mediante la longitudinalidad que la atención primaria brinda para llevar a cabo un abordaje biopsicosocial que no nos reduzca a meras patologías.

    Por esta razón, consideramos de capital importancia comenzar por garantizar que en los diferentes planes de estudios de las facultades de medicina como la nuestra, se garantice una formación de calidad en relación a la atención primaria. Pues independientemente de la especialidad que cada uno de nosotros elijamos en un futuro, nunca debemos olvidar ni infravalorar la importancia que tiene una atención primaria bien cuidada y dotada como eje vertebrador de una atención sanitaria de calidad.

    Salud Mental

    También queríamos hacer referencia a esa parte desconocida por muchos y frecuentemente estigmatizada, como lo es la Salud Mental. Tal y como determina la OMS, la salud es ese estado de bienestar físico, pero también mental y social, el cual en muchas ocasiones queda relegado a un segundo plano. Algo no estamos haciendo bien, si fomentamos que las personas se sientan coaccionadas o experimenten vergüenza si necesitan recurrir a los profesionales de la salud mental. Algo que, sin embargo, no ocurre ante otras enfermedades.

    Como estudiantes de medicina, nuestra salud mental no siempre se ha tenido en cuenta de la manera que nosotros necesitábamos. Somos conscientes de que los planes de estudios deben garantizar una adquisición adecuada relativa a conocimientos médicos, pero esto no debería significar un menoscabo de nuestra salud mental.

    Por eso animamos a las facultades para que los alumnos tengan acceso a actividades extraacadémicas que les doten de las herramientas suficientes con las que poder gestionar todas aquellas emociones que configuran su día a día, porque antes que estudiantes, siempre fuimos personas.

    Prácticas clínicas

    Por este motivo, también debemos reivindicar nuestro papel activo en las prácticas clínicas. Sabemos que muchos de vosotros os esforzáis porque así sea, pero por desgracia en muchas ocasiones esto no sucede así. La formación teórica quedaría incompleta si no se acompaña de una formación práctica de calidad, por lo que es imprescindible que el estudiantado de medicina sea valorado y tenido en cuenta como sujeto participativo de las labores sanitarias.

    Con todo ello, queda establecido la importancia que tiene la labor asistencial, pero esta no sería posible sin investigación y, a su vez, la investigación tampoco es posible si no se proporcionan recursos suficientes para hacerla realidad.

    discurso medicina Albacete 2021

    Un viaje en el tiempo

    Y ahora, antes de terminar, queremos pediros un último favor: cerrad los ojos, porque vamos a llevaros de vuelta a aquel septiembre de 2015. Eran nuestros primeros pasos dentro de la facultad, la que acabaría siendo nuestra casa para siempre. Cruzamos las primeras miradas con los que, hasta entonces, eran completos desconocidos, sin ser conscientes de todos los recuerdos que nos quedaban por construir juntos. Debemos reconocer que la Feria de Albacete, facilitó todo esto.

    Y que aquellas casas rurales, fueron inolvidables. Y llegó segundo. Aquellos que solo eran compañeros se habían convertido ya en amigos y familia. Compartíamos inquietudes, risas y cervezas. Y, a pesar de que los 33 créditos de MEFICH nos quitaron el sueño muchas noches, nuestro camino seguía dibujándose cada vez con más experiencias en la mochila.

    En tercero, con la redistribución de clases, llegaban a nuestras vidas personas que acabarían constituyendo una parte fundamental de nosotros. Llegaba el momento de nuestras primeras prácticas en el hospital ¡qué agobio con las historias de semio!, pero qué emocionante fue saber que habíamos tomado la decisión correcta.

    Nuestra primera OSCE

    También llegó nuestra primera OSCE, en la que nos sentiríamos médicos por primera vez, a pesar de los nervios que nos despertaba aquel silbato sonando entre las paredes del CAS, que ya ni siquiera sigue en pie. Pero el cambio llegaba en cuarto. La cantidad de asignaturas ya era abrumadora, y la distancia entre el Perpetuo y el General se hacía incalculable. Muchos pensábamos que no podríamos. Pero estamos aquí y eso siempre significó algo.

    La pandemia

    Durante quinto, los días eran interminables con las exigencias académicas mañana y tarde. Y sin pensarlo, llegaba a nuestras vidas la pandemia. Nos vimos obligados a romper todos aquellos esquemas que teníamos en mente. Nos despedimos sin saber cuándo volveríamos a abrazarnos y fuimos conscientes de que hasta que no perdemos algo, no sabemos el valor que tiene. Por suerte supimos estar cerca a pesar de la distancia y abrazarnos sin ni siquiera rozarnos.

    La incertidumbre

    Llegó sexto, nuestro deseado sexto. La situación actual ha hecho que no hayamos podido disfrutar de este curso como siempre habíamos soñado. Las circunstancias se volvían inestables con mucha frecuencia y, en ocasiones, no sabíamos qué hacer. La incertidumbre ha sido protagonista de este último año, y la mascarilla un accesorio indispensable con el que poder cuidarnos unos a otros.

    Pero hay miradas que dicen mucho más que algunas palabras, y nosotros sabíamos cómo entendernos. Sentíamos que se nos escapaba el tiempo de las manos cuando llegaban el último examen, nuestras batas y la exposición del TFG. El fin de una preciosa etapa ya estaba cerca.

    Y sin darnos apenas cuenta, estamos hoy aquí. Con la emoción escapándose por los poros de nuestra piel y rodeados de las personas que han sido la suerte de nuestras vidas hasta aquí. A todas ellas, gracias de corazón. Como todo en la vida, este discurso también tiene su fin, y ahora nos toca ir terminando. Por eso, queremos animaros a disfrutar lo que queda de este día, que siempre nos acompañará en nuestra memoria por todo lo que lleva implícito.

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    “Si puedes curar, cura. Si no puedes curar, alivia. Si no puedes aliviar, consuela. Si no puedes consolar, acompaña”

    Agradeceros de nuevo la compañía a lo largo de todo este viaje, por haberlo hecho único e imborrable y por hacer que la Medicina no esté solo en los libros. Todos encontramos nuestro lugar, la suerte ha sido coincidir aquí. Pero no dudéis nunca de que esto continuará, porque hay “para siempres” que nunca terminan.

    Tan solo queríamos recordar que el día de mañana, cuando como médicos y médicas estemos delante de un paciente, no podemos olvidar que se trata de una persona y no solo una enfermedad. “Si puedes curar, cura. Si no puedes curar, alivia. Si no puedes aliviar, consuela. Si no puedes consolar, acompaña”.

    (Marisol Rodríguez Alcaraz acompañó al piano en la parte final del discurso).

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