• Dolor, un día para recordarlo y 365 para sufrirlo

    Cada 17 de octubre se celebra el Día Mundial del Dolor, un síntoma que puede cronificarse

    El dolor puede ser considerado como un síntoma, pero es también una enfermedad. De hecho, desde 2010, la Organización Mundial de la Salud (OMS) pide que éste se catalogue y se aborde como una enfermedad en sí misma y, desde entonces, el 17 de octubre se conmemora el Día Mundial del Dolor.

    Imagen de archivo.

    El dolor se considera enfermedad cuando se experimenta más de tres meses

    Según datos manejados por la Sociedad Española de Neurología (SEN), en España, un 32% de la población adulta sufre algún tipo de dolor, aunque solo estaría diagnosticado en un 27% de la población, principalmente en personas entre los 45 y los 54 años de edad y mayoritariamente en mujeres (60%).
     
    El dolor motiva el 40% de las consultas de pacientes españoles en la Atención Primaria cada año, de los cuales, aproximadamente el 20% de estos pacientes experimenta dolor más de 6 meses. En todo caso, solo con experimentar dolor durante más de 3 meses ya se considera dolor crónico.

    El dolor crónico alcanza al 17% de los españoles

    Los últimos estudios apuntan a que un 20% de la población europea sufre dolor crónico, y que en España podría alcanzar al menos a un 17% de la población. La OMS califica el dolor crónico como la mayor amenaza para la calidad de vida a nivel mundial, supone un coste sociosanitario superior al 3% del producto interior bruto en Europa y, en España, representa la principal causa de absentismo laboral.

    El dolor neuropático tiene una incidencia anual del 1% de la población, lo que implica que, en España, cada año, se producen más de 400.000 nuevos casos de personas que comienzan a padecer dolor neuropático o dolor con condiciones mixtas (tanto de dolor nociceptivo como de dolor neuropático).

    Una enfermedad lleva a otra

    Aunque los mecanismos desencadenantes del dolor neuropático no son del todo conocidos, sí se sabe que, con mucha frecuencia, surge asociado a enfermedades como la diabetes, herpes zóster, ictus, párkinson o cáncer, bien como consecuencia de la enfermedad en sí o bien por haber tenido que someterse a ciertos tratamientos quirúrgicos o médicos.

    El 85% de los pacientes amputados

    Hasta un 3% de los pacientes de los pacientes sometidos a cirugía general u ortopédica cursan con dolor neuropático, pero estas cifras son aún más altas en caso de que se haya producido una amputación (el 85% de los pacientes) o de algún tipo de lesión traumática en el nervio periférico (50%).

    El 33% de los pacientes con cáncer

    También tiene una prevalencia altísima en pacientes con cáncer (33%), sobre todo en cáncer de mama; con dolor lumbar (37%); con lesión en la medula espinal (67%); o con esclerosis múltiple (28%). Pero, además, también puede tener la causa en tóxicos, fármacos, infecciones, alteraciones metabólicas y/o hereditarias, entre otras causas.

    El dolor neuropático, de los más complicados

    Además, los pacientes con dolor neuropático no solo experimentan un dolor más severo que pacientes con otro tipo de dolor, sino que la depresión (34%), la ansiedad (25%) y los trastornos del sueño (60%) son también significativamente más prevalentes, comparado con otros tipos de dolor. Por otra parte, se estima que el 41% de los pacientes con dolor neuropático han sufrido dolor durante más de 5 años.
     
    Y es que, a pesar de que en los últimos años se ha llevado a cabo un gran avance en su tratamiento, en muchas ocasiones, o no es bien tolerado por el paciente, o se pierde la adherencia terapéutica por distintos factores, o incluso el dolor se hace refractario a cualquier tipo de tratamiento. Se estima que, con los tratamientos actuales, solo un 40-60% de los pacientes logran un adecuado alivio del dolor.

    Cuando el sistema nervioso interpreta como doloroso un estímulo que no lo es

    “Un alto porcentaje de las personas que sufren dolor crónico en España padece dolor neuropático: hasta un 8-10% del conjunto de la población. El dolor neuropático  no sólo es un tipo de dolor que tiende a la cronificación sino que, a diferencia del dolor nociceptivo, no se debe a la respuesta a un estímulo, sino que es un dolor causado por una lesión o enfermedad del sistema somatosensorial, a nivel central o periférico, que hace que el sistema nervioso interprete como dolorosos ciertos estímulos que en realidad no lo son”, explica el Dr Alan Luis Juárez-Belaúnde, Coordinador del Grupo de Estudio de Dolor Neuropático de la Sociedad Española de Neurología (SEN).

    Hemeroteca

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