• La importancia de ejercitar el tacto

    La terapeuta ocupacional Miriam Morcillo da las claves para ejercitar el tacto y recuperarlo

    El Autor

    Miriam Morcillo

    Terapeuta Ocupacional de la Asociación de Párkinson de Cuenca

    ejercitar tacto

    Ejercicios sencillos para recuperar un sentido ‘vital’

    Múltiples estudios demuestran que el sentir la piel de otras personas tiene importantes beneficios para la salud: disminuye el dolor, refuerza el sistema inmunitario, calma el ritmo cardíaco y normaliza la presión sanguínea.

    También desde el punto de vista emocional, aumenta las hormonas de bienestar, disminuye la sensación de soledad y reduce los síntomas de ansiedad y depresión.

    Frente a esto, el COVID-19 ha puesto de manifiesto una reducción del contacto físico sobre todo en personas mayores. Además, según la Universidad Hebrea de Jerusalén en una muestra de 30.000 personas de 40 países que habían sufrido el COVID-19, un 10% de ellas presentaba problemas en olfato, gusto y tacto.

    Hipoestesia

    Denominamos hipoestesia a la dificultad para discriminar los estímulos que recibimos a través del tacto. El área cerebral en la que se implica el tacto es el área somatosensorial primaria, concretamente en la corteza parietal.

    En este sentido, desde la Asociación Párkinson Cuenca, concretamente en el área de terapia ocupacional, se considera fundamental considerar la estimulación táctil en la intervención, a pesar de no encontrar evidencias significativas en pacientes de COVID-19, si se pueden extraer en otras patologías neurológicas como esclerosis múltiples y accidentes cerebrovasculares.

    A continuación, se propone un taller de estimulación sensitiva centrada en el tacto con materiales asequibles para poder practicar desde el domicilio, la frecuencia será de una vez al día durante un mes.

    En primer lugar, se administraría un cuestionario inicial haciendo referencia a las dos últimas semanas y pasados treinta días un nuevo cuestionario recogiendo los resultados obtenidos.

    Entre otras variables, se analizaría la percepción de la temperatura, la aparición de sensaciones desagradables tales como hormigueo o parestesias y la funcionalidad en las manos.

    • Objetivos:
    • Mejorar la discriminación a través del tacto.
    • Realizar mejores agarres.
    • Desarrollar el esquema corporal.
    • Proteger ante estímulos nocivos.
    • Favorecer las funciones cognitivas.
    • Fortalecer el vínculo con otras personas.

    En el presente video se plantean ejercicios que se ajustan a los objetivos planteados, al principio de manera pasiva para terminar de manera activa.

    • El procedimiento es el siguiente:
    • Se realizarían movilizaciones y elongaciones de los dedos previamente.
    • Estimulación zona palmar mediante cepillado.
    • Estimulación zona dorsal y lateral con texturas.
    • Vibración.
    • Golpeteo ligero y presiones agudas.

    Finalmente se proponen actividades a realizar de manera activa:

    • Discriminación con y sin visión en arena kinética de diferentes alimentos como macarrones y legumbres.
    • Manipular y discriminar diferentes texturas: figuras geométricas, objetos de higiene personal, algodón, estropajo, etc…

    Hemeroteca

    Entrenamiento del olfato después del COVID

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