• El equipo donde el 92% de los pacientes mejora

    Son pioneras a nivel nacional, hasta el punto de que médicos y fisioterapeutas de otras provincias acuden a su equipo para formarse. La Unidad de Rehabilitación de Suelo Pélvico, formada por las doctoras Carmen Alonso y Soraya Hijazi, junto con la fisioterapeuta Virtudes Arnedo, logra cada año, desde 2008, que el 92% de sus pacientes, en su mayoría mujeres con incontinencia urinaria, mejore.

    La Unidad de Rehabilitación de Suelo Pélvico logra que el 92% de sus pacientes, en su mayoría mujeres con incontinencia urinaria, mejore.

    La Unidad de Rehabilitación de Suelo Pélvico es la clave frente a la incontinencia

    Esta unidad pionera del Hospital Perpetuo Socorro de Albacete se encarga de las disfunciones perineales, es decir, los problemas que afectan al suelo pélvico, tanto desde el punto de vista ginecológico y urológico como coloproctológico.

    La doctora Hijazi, quien la pusiera en marcha en 2008, explica que cuando falla alguna estructura que conforma el suelo pélvico, tanto en el hombre como en la mujer, se puede producir incontinencia urinaria, incontinencia de gases o de heces, problemas de vaciado vesical, estreñimientos crónicos, prolapsos de órganos pélvicos o incluso dolor pélvico crónico.

    Estos problemas, capaces de minar la calidad de vida, afectan más a mujeres que a hombres. Y es que el parto es el principal factor de riesgo, sumado a la edad y la obesidad. En los hombres, sin embargo, el problema aparece cuando se enfrentan a una operación de carcinoma de próstata.

    En la consulta de suelo pélvico se hace un estudio exhaustivo y personal de cada paciente. El equipo realiza un diagnóstico y unas pruebas complementarias, como electromiografía de suelo pélvico mediante unas sondas especialmente diseñadas para ello y registros manométricos en los casos de incontinencia fecal.

    Detrás del éxito de esta unidad hay una década de trabajo y la investigación, traducida en tesis doctoral, de la doctora Hijazi.

    Los pacientes tienen la llave

    La incontinencia de orina es la patología más frecuente y la que más deteriora la calidad de vida, de ahí que la doctora Hijazi subraye que el objetivo de la unidad es “mejorar esa calidad de vida tan deteriorada e intentar que los pacientes recuperen pronto su vida social, familiar, laboral, sexual y personal”.

    “Hasta ahora nuestros resultados han sido excelentes, pero siempre debemos contar con la colaboración activa de los pacientes. En fisioterapia, se enseñan multitud de ejercicios, y cómo utilizar la musculatura correctamente, pero son los propios pacientes los que realizan los ejercicios de forma domiciliaria, bajo supervisión”, puntualiza Soraya Hijazi.

    En el 44% de los casos se alcanza la continencia absoluta

    Los pacientes pasan de utilizar pañales a usar compresas y, en el 44% de los casos, se consigue la continencia absoluta, sin pérdida de orina. Pero los datos realmente positivos para este equipo son que después de realizar el tratamiento rehabilitador, un 92% de los paciente refieren haber mejorado con respecto a su situación inicial y cuando se evalúan al año de seguimiento, esa mejoría persiste en un 75,2%. “Esos son los datos que nos animan a seguir trabajando e innovando técnicas para mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes”.

    Actualmente, se tratan en esta unidad pacientes con dolor pélvico crónico, coccigodinia (dolor en cóccix), disparunia (dolor con las relaciones sexuales) e incluso dolores anales con importante dificultad para realizar de forma normal las actividades de la vida diaria. Para ello, la Unidad de Rehabilitación de Suelo Pélvico está aplicando las últimas técnicas de infiltración guiada con ecografía de los músculos contracturados con toxina botulínica, con resultados muy esperanzadores, “lo cual abre una ventana de esperanza para estos pacientes”.