
La Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) aplaude la publicación del Real Decreto que modifica el Real Decreto 589/2022, de 19 de julio, que permite recuperar una elección presencial de las plazas de Formación Sanitaria Especializada, lo que acaba con la polémica de la elección MIR vía telemática que se aplicó durante el primer año de la pandemia por COVID-19.

Según ha señalado el Ministerio de Sanidad, este Real Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y se establece “un régimen transitorio para la aplicación de modificaciones, de modo que la flexibilización en la modalidad de adjudicación será aplicable en la convocatoria en curso”.
En este sentido, la Confederación quiere instar a Sanidad a que agilice los plazos y los mecanismos necesarios en la medida de lo posible para que esa aplicación de modificaciones no retrase ni la elección de plaza MIR ni la incorporación a los puestos de trabajo de los futuros especialistas del Sistema Nacional de Salud, que está prevista para finales del mes de mayo. Y es que un retraso en esta planificación trastoca de manera importante el funcionamiento de los servicios de los centros sanitarios.
Flexibilización del sistema de elección y adjudicación
Uno de los cambios más destacados es la posibilidad de que la elección y adjudicación de plazas se realice tanto por medios electrónicos como de forma presencial. Esta modificación responde a la demanda social y al debate generado en torno al sistema exclusivamente electrónico implementado en 2020 por la situación pandémica. La nueva normativa permitirá que cada convocatoria establezca la modalidad de elección, ofreciendo así una mayor flexibilidad a los aspirantes.
Segunda ronda de adjudicación para plazas vacantes
El Real Decreto también aborda el problema de las renuncias a plazas previamente adjudicadas, que dejaban vacantes sin cubrir en la misma convocatoria. Para solucionar esta situación, se introduce la posibilidad de una segunda ronda de adjudicación, exclusivamente electrónica, para cubrir las plazas que queden vacantes tras la primera asignación. Esta medida permitirá optimizar la disponibilidad de profesionales sanitarios especializados y responder a la necesidad de cubrir ciertas especialidades.