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Las rutas de senderismo de la Diputación nos llevan al “Río del Escorial y La Mesta”, en Alcazar, con una dificultad técnica media, un trayecto circular de 15 kilómetros de distancia, cinco horas de duración y con salida desde alto del Cantalar en la antigua carretera de Alcaraz a Riópar.
📷 Fotografías: Luis Sánchez Vizcaíno
Recogerían en Alcaraz a los amigos y miembros del club de Montaña “El Collao” de Alcaraz, Juan Parras y José María, quienes harían de guías, para desplazarse en autobús hasta el Alto del Cantalar de la antigua carretera de Alcaraz a Riópar, catalogada como una de las más bonitas de Castilla La Mancha, donde sale el camino del Cantalar y el del Ojuelo.
El sol ya se hacía notar, así, tras bajar del autobús tomarían la senda de Cañada Lengua, que baja hasta el valle del río del Escorial. Sin duda, un precioso paseo rodeado de jóvenes arboles debido a la reforestación, ya que estaba deforestado por la antigua extracción del carbón en la zona.
Tras cruzar el río Escorial, comenzaron una larga y suave ascensión, por el antiguo camino de Vianos a Paterna del Madera, hasta llegar a la cuerda del cerro Mata Ovejas junto a la Cocota del Moclín.
Bajaron hasta una escondida aldea del municipio de Alcaraz, La Mesta, llamada así porque en Alcaraz se desarrolló una de las primeras asambleas de pastores trashumantes, que en 1273 fueron agrupadas por Alfonso X, bajo el nombre de Real Sociedad de Ganaderos de La Mesta. Fue entonces cuando se estableció una red de vías pecuarias de dominio público que han llegado hasta nuestros días -aunque en la actualidad un tanto maltratadas-. En este refrescante lugar aprovecharon para almorzar junto al río.
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Abandonaron la aldea en dirección a la Vereda del Llano de Murcia, por la que siguieron hasta desviarse por el antiguo camino de herradura de Alcaraz a Paterna del Madera, que les conduce hasta Alcaraz.
Llegarían así hasta el Portillo de Paterna, al borde de la meseta caliza desde donde tenían unas vistas inmejorables del valle del Guadalmena de fondo y cómo no, Alcaraz, Povedilla y al fondo Villanueva de la Fuente.
Comenzaron la bajada, un tanto peligrosa, por un tramo del viejo camino que unía Alcaraz con Vianos. Primero por una preciosa senda y después por un camino que discurre por los olivares de la Cuesta de la Madre, también con unas vistas excepcionales de Alcaraz, encaramada en el cerro de San Cristóbal. Así, llegarían hasta la piscina del municipio, donde comerían y les recibiría la primer teniente de alcalde y concejala de cultura, deportes y turismo, Yolanda Ballesteros Esteban, quien agradeció la visita a su municipio.
La sequía no da tregua
En esta ocasión, la sequía se hizo notar a lo largo del trayecto, entre ejemplares de pino, encina, roble quejigo y todo el cortejo vegetal serrano, que en estas fechas despliega su espléndida floración, contemplando campos repletos con diversidad de colores debido a las diferentes flores, aunque evidentemente menos que años anteriores.
Triunfo absoluto de nuevo en las rutas por la Sierra de Alcaraz y Segura, que hizo disfrutar a los cien participantes de esta actividad de las maravillas de entornos naturales que esconden nuestros municipios.
