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Doctora María Luisa Martínez. Fotografía: Eugenio Retamosa
Un ensayo clínico de la doctora María Luisa Martínez, responsable del Servicio de Dermatología de Villarrobledo, ha demostrado que el trasplante de injertos punch de folículos pilosos de cuero cabelludo -conocido vulgarmente como técnica del pelo de muñeca en el injerto de pelo- estimula más rápidamente la curación de las úlceras venosas crónicas que el tradicional trasplante de piel sin pelo.
El ensayo titulado ‘Evaluación del trasplante de folículos pilosos mediante biopsias punch como alternativa terapéutica en la cicatrización de úlceras venosas crónicas. Estudio comparativo con el trasplante tradicional de injertos de piel sin pelo terminal’, se ha realizado con pacientes del Hospital General de Villarrobledo y del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete cuyas úlceras crónicas en miembros inferiores no cicatrizaban con las medidas habituales.
Las úlceras evaluadas tuvieron un tamaño medio inicial de 23,34 centímetros y un tiempo de evolución de 6,04 años. Según la doctora Martínez, “al finalizar el estudio la reducción del área que recibió el trasplante de folículos pilosos fue de un 75,15%, mientras que la zona que recibió los injertos de piel sin pelo fue sólo de un 33,7%”, siendo la diferencia estadísticamente significativa. Además, la úlcera total se redujo en un 55,69%.
El trabajo de investigación de la doctora Martínez supone un importante logro en el ámbito dermatológico. No en vano, las úlceras en miembros inferiores representan un problema médico frecuente, invalidante, crónico y recurrente. La prevalencia de úlceras en miembros inferiores varía según los diferentes estudios, estimándose entre un 0,12 y un 1,1% de la población.
Prueba del enorme valor que tiene su estudio es que ha recibido recientemente el premio a la mejor comunicación de Cirugía en la XXVIII Reunión del Grupo Español de Dermatología Quirúrgica, Láser y Oncología cutánea de la Academia Española de Dermatología y Venereología y que será publicado en la prestigiosa revista ‘Journal of the American Academy of Dermatology’.
La doctora Martínez ha querido compartir el mérito de su trabajo con todas aquellas personas que han colaborado en su elaboración. Así, ha destacado la labor desempeñada por el personal de Enfermería de Villarrobledo, que ayudó en las curas a los pacientes. “Gracias a su directora, Llanos Rubio y a sus compañeras María Dolores Serna, Luz Gracia y Andrea Leal”, recalcó.
También ha tenido palabras de agradecimiento para sus directores de Tesis y miembros del ensayo clínico, los doctores Eduardo Escario, Enrique Poblet, Francisco Jiménez y para el topógrafo David Sánchez, que fue el encargado de realizar el estudio y fotografiado de las úlceras.
Por último, la doctora Martínez también ha querido reconocer a los pacientes por su confianza y participación.
