Diario Sanitario Periódico digital de información sanitaria.
Las más de 1.200 farmacias de Castilla-La Mancha, como las del resto del país, ya tienen los test COVID en sus oficinas, ya que el Consejo de Ministros ha dado luz verde hoy a su dispensación. Después de meses de espera, las farmacias no harán test, como les hubiese gustado, pero sí los dispensarán sin receta. Será el paciente quien tenga que informar a su médico en caso de que el resultado sea positivo.
Los test COVID se dispensarán sin receta, pero sólo en las farmacias
El paciente será quien comunique el positivo a su médico
El farmacéutico albaceteño Eduardo Giménez le ha tenido que decir hoy a una señora que se fuera a Urgencias. Y es que su nieta había tenido contacto con un positivo y ella empezaba a sospechar del contagio porque tenía décimas. Casos así se podrían haber resuelto en el acto si los farmacéuticos, en contacto directo con los sistemas públicos de salud, hubiesen hecho test desde un principio. Sin embargo, su papel se limitará ahora a dispensar test cuyos precios rondan los 8,7 euros.
Con el paso dado por el Consejo de Ministros, se modifican los artículos 13.6 y 25.8 del Real Decreto 1662/2000 con una doble finalidad. Por un lado, incluir los productos de autodiagnóstico de la COVID-19 entre aquellos exceptuados de la necesidad de prescripción para su adquisición en farmacias; y, por otro, permitir la realización de publicidad dirigida al público en relación con estos productos.
En este contexto, el Consejo General de Colegios Farmacéuticos ha lamentado el tiempo que se ha perdido en aprovechar la red de farmacias para reforzar la capacidad de detección precoz del Sistema Nacional de Salud. Y es que en España la red cuenta con 22.137 farmacias con sus 54.555 farmacéuticos comunitarios.
De esta manera, y tras meses de espera, esta aprobación permitirá sumar la red de farmacias españolas a la detección precoz de la enfermedad, incrementando así la capacidad preventiva del conjunto del Sistema Nacional de Salud, en un momento decisivo ante el repunte de casos. El paso que se da ahora es la supresión de la necesidad de receta médica.
Además, el texto al que se ha dado luz verde hoy destaca la necesidad de aumentar la capacidad diagnóstica del Sistema Nacional de Salud, con objeto de identificar de forma rápida sospechas de positivos y así controlar eficazmente la progresión de la pandemia, utilizando para ello las farmacias comunitarias, únicos centros autorizados para la dispensación de los test de autodiagnóstico.
