La cruzada de una niña sorda para escuchar

Dejó su Ucrania natal y atravesó media Europa hasta la localidad albaceteña de Villarrobledo para tener un implante coclear

Los 25 años de Iryna Ryavk están llenos de lucha. Su historia es la de una niña sorda que dejó su Ucrania natal y cruzó media Europa para poder escuchar gracias a un implante coclear. Este pequeño aparato electrónico se implanta mediante una cirugía y permite al paciente procesar los sonidos en el cerebro. Se trata de un gran paso que, si bien no posibilita recuperar la audición normal, sí mejora enormemente su calidad de vida.

Iryna realizando el símbolo del implante coclear.

Ucrania

Muchos años antes de que Ucrania copara la información de los medios de comunicación, en el año 1999, Iryna y sus padres llegaban a Villarrobledo (Albacete). Su padre buscaba una vida mejor y era consciente de que en España las oportunidades para su hija sorda, entonces con apenas 3 años, serían mayores que en su país. Tras dejar la localidad ucraniana de Ternopil se instalaron en España donde Iryna comenzó a ser atendida por profesionales que trataron su sordera. A los 6 años el Dr Almodovar operó a Iryna en el Hospital General de Albacete, a partir de ese día el implante coclear sería su compañero de viaje.

AICCLAM

Tras la operación llegó el trabajo más importante, “aprender a escuchar”. La rehabilitación logopédica de los implantados cocleares es una de las tareas que desarrolla AICCLAM (Asociación de Implantados Cocleares de Castilla-La Mancha). Con 154 socios en la provincia de Albacete y 803 en toda Castilla-La Mancha su función es conducir el proceso de rehabilitación tras la intervención y obtener el máximo provecho auditivo de la prótesis.  La logopeda Maribel Luján ha acompañado a Iryna desde que era una niña hasta fechas recientes. Es una de las caras visibles de esta asociación con sede en Albacete que atiende a pacientes de toda la región.

Iryna con Maribel, su logopeda en AICCLAM.

Luchadora

Con muchas horas de esfuerzo a sus espaldas y con el apoyo de su familia y del equipo de AICCLAM, Iryna ha conseguido superar todas las etapas educativas hasta conseguir dos títulos en la Escuela de Arte de Albacete: el Grado Superior de Escaparatismo y el Grado Superior de Proyectos y Dirección de Obras de Decoración. Aunque algunos profesores no se lo pusieron fácil y no quisieron adaptarse a su falta de audición, ella nunca tiró la toalla, y confiesa que también hay otros muchos que entendieron su problema y le pusieron facilidades. Hoy trabaja en una tienda de decoración y lo compagina con su otra pasión, pintar. Su perfil de Instagram @kusira_art muestra algunas de sus obras y es que, como ella misma afirma, sus problemas de audición le han llevado a desarrollar más el sentido de la vista.

Iryna tras la carrera organizada el 12 de marzo a beneficio de AICCLAM.

Respeto y empatía

Iryna se refiere con tristeza a varios episodios en los que la gente, cuando señala que no ha entendido algo, reacciona con enfado o se niega a escribir aquello que no escucha bien. Reconoce que falta mucha empatía en la sociedad y que con un poco de paciencia y respeto se podría facilitar mucho la vida de las personas con sordera. Vocalizar, mirar a la cara o escribir en último caso, son pequeños gestos que las personas oyentes podemos ofrecer para facilitar su audición. Por desgracia estas situaciones se siguen repitiendo, pero Iryna ya no se calla, sabe que está en su derecho de ser atendida en igualdad de condiciones. Durante su infancia y adolescencia se sentía aislada y diferente y se quedaba en un segundo plano, pero ahora es consciente de que, siempre con el respeto que pide para ella, debe reclamar su lugar en la sociedad y sus derechos.

Nuevo implante

En la primavera de 2021 Iryna sustituyó su anterior implante coclear por otro más moderno. La operación la costeó la sanidad pública, además, en Castilla-la Mancha el implante se sustituye gratuitamente cada 7 años si este da problemas. Gracias al nuevo dispositivo ahora disfruta oyendo la televisión o los audios de WhatsApp de su madre, y es que el nuevo implante se conecta directamente por bluetooth a la televisión o el móvil mejorando así la calidad del sonido que llega a su implante. Entre esos audios está uno de su tía de Ucrania que acaba de llegar a Madrid para trabajar aquí este verano. Afortunadamente su familia en Ucrania está bien y en su ciudad, Ternopil, de momento no hay militares ni conflicto. No obstante, Iryna sabe que a día de hoy solo hay una palabra que desea “escuchar” por encima de todo: paz.

Iryna muestra su implante coclear