Diario Sanitario Periódico digital de información sanitaria.
Un joven enfermero trata de reflejar a la población en una carta por lo que han pasado y pasan el personal sanitario y los pacientes. El coronavirus no se ha ido; sus víctimas siguen muriendo; Juanma García Sánchez insiste en que no se puede bajar la guardia.
Voy a intentar ser breve aunque creo que no lo lograré… Mi nombre es Juanma García Sánchez y soy enfermero desde hace 10 años. Me gustaría contaros que desde primeros de marzo me encuentro luchando en primera línea para combatir esta pandemia desde Atención Primaria, planta COVID y actualmente en residencia (una de las más estigmatizadas de la ciudad de Albacete).
(…) he tragado lágrimas de pena, impotencia y empatía
He visto a gente morir sola y la he acompañado en sus últimos momentos para hacer un poco más humana esa etapa final de la vida. He informado a familiares vía telefónica de que su allegado había fallecido o se encontraba en estado grave. He escuchado el llanto a través de ese mismo teléfono de esos mismos familiares suplicándome que por favor hiciésemos lo posible porque no sufriesen y he tragado lágrimas de pena, impotencia y empatía tras saber que no se podían despedir de ellos.
He visto cómo compañeros se marchaban de baja tras contagiarse por COVID-19. He trabajado con falta de equipos de protección (sobretodo al inicio). También he improvisado equipación casera con bolsas de basura.
He agradecido la solidaridad de todas aquellas personas que han donado diferentes materiales para protegernos, para proteger a esos “héroes sin capa”. Así nos llaman, aunque, humildemente, no me considero ningún héroe. He ido a trabajar con miedo e incertidumbre de si me podía contagiar o no y llevarme “el bicho” a casa y me he emocionado al escuchar ese primer aplauso que se dio no solo a los sanitarios, sino a todas las personas que estamos luchando en esto, incluyendo a los que os habéis quedado en casa.
He echado y sigo echando de menos a mi familia y amigos a los cuales no puedo ver porque la situación así lo requiere… y podría continuar con muchos más hes… pero sabéis qué. Que no lo haré, porque muchos de vosotros si entenderíais todo lo que quiero expresar pero otros muchos no…
Cambio aplausos por responsabilidad
Desde hoy cambiaría esos aplausos por gente responsable, gente consciente de la situación y empática con todas aquellas personas que estamos luchando para que todo esto pase cuanto antes y podamos recuperar “la normalidad”.
Se ha demostrado que el esfuerzo de todos no ha servido para concienciar a gran parte de la población de la gravedad de la situación. Muchos de vosotros habéis incumplido las medidas estipuladas desde el gobierno y habéis puesto en peligro de nuevo al resto de la población. No obstante, quiero recordaros que soy enfermero y seguiré luchando en primera línea, exponiendo mi salud para cuidaros cuando lo necesitéis.
