
En 2016 la neumonía fue la causa de 9.310 defunciones en España, 535 de ellas en Castilla-La Mancha. Por este motivo, ocho sociedades científicas de Castilla-La Mancha han hecho público su apoyo a la vacuna conjugada contra el neumococo en mayores de 65 años. Dar este paso ahorraría a los hospitales públicos cerca de 4 millones de euros. De hecho, el Ministerio de Sanidad ha acabado por dar la razón a neumólogos, geriatras, médicos de Familia, cardiólogos, especialistas en Salud Pública y farmacéuticos. El calendario de vacunación que compartirá toda España a partir de 2019 establece que la vacuna contra el neumococo se administre a los niños a los 2, 4 y 11 meses, así como a los mayores de 65 años.
La vacuna contra la neumonía llegará de forma gratuita a todos los mayores de 65 años en 2019. Y es que hay que tener en cuenta, tal y como recuerda la Sociedad de Neumología (SEPAR), que la neumonía es una enfermedad más frecuente de lo que se piensa. Se puede presentar de forma leve, pero la necesidad de ingreso hospitalario aumenta con la edad.
Un 11% de las neumonías acaban en las unidades de cuidados intensivos
Los síntomas aparecen con rapidez y pueden incluir: fiebre alta con escalofríos, tos con producción de esputo, dificultad para respirar y dolor en el costado, así como sensación de cansancio y confusión.
Los síntomas incluyen fiebre alta y dificultad para respirar
Si es grave, la neumonía requiere ingreso hospitalario y en un 11,1% puede ser necesario tratamiento en las unidades de cuidados intensivos. Según SEPAR, las complicaciones más frecuentes son en un 69,9% de los casos extrapulmonares, en un 47,2% pulmonar y el 7,1% de los pacientes puede requerir ventilación mecánica no invasiva.
La vacuna de la neumonía se puede administrar a cualquier edad
Entre los pacientes hospitalizados pueden estimarse un 5% de mortalidad intrahospitalaria y un 5,6% a 30 días. Por todo ello, los neumólogos recuerdan la necesidad de estar alerta, establecer un diagnóstico rápido y tomar las medidas preventivas necesarias.
El doctor David de la Rosa, neumólogo y coordinador del Área de Tuberculosis e Infecciones Respiratorias de SEPAR, recuerda que la principal forma de prevención de la neumonía es la vacuna contra el neumococo. “La vacuna antineumocócica puede administrarse a cualquier edad a partir de las 6 semanas de vida. Y de un modo general, se recomienda para paciente inmunodeprimidos, con fístula del líquido cefalorraquídeo, implantes cocleares o anesplenia (ausencia de bazo), y también para los mayores de 65 años o aquellos de cualquier edad que presentan enfermedades crónicas respiratorias, hepáticas, renales, cardiovasculares, diabetes, tabaquismo y alcoholismo”.
Existen dos tipos de vacuna contra la neumonía
En realidad, existen dos vacunas: la vacuna polisacárida de 23 serotipos (VNP23) y la vacuna conjugada de 13 serotipos (VNC13). La primera actúa frente a
23 tipos de neumococo, pero su inmunidad es débil y se desvanece con el tiempo por lo que necesita revacunación a los 5 años. La vacuna conjugada tiene una mayor eficacia inmunógena, tiene efecto memoria y no necesita revacunación.
La dieta, la higiene y el ejercicio también son preventivos
En cuanto a enfermedad infecciosa y por lo tanto contagiosa, el doctor de la Rosa ha explicado, a través de un comunicado de la SEPAR, que otras medidas de prevención tan sencillas como “lavarse las manos con frecuencia, desechar de manera apropiada los pañuelos y cubrirse la boca y la nariz al estornudar o toser”. También contribuyen a prevenir la enfermedad seguir una dieta saludable, extremar la higiene orodental, hacer actividad física y no fumar.