• Los hospitales harán sitio a la gripe

    Cuando llegue el momento, el Sescam favorecerá la liberación de camas. El Plan de Alta Frecuentación por la Gripe pretende dar respuesta a las situaciones puntuales de sobrecarga asistencial que se puedan dar en los centros sanitarios como consecuencia del repunte en las urgencias con motivo de esta patología. Y es que se estima que durante la pasada temporada gripal, cuando el virus tuvo poca incidencia, padecieron la gripe unas 65.035 personas en Castilla-La Mancha, lo que supone el 3,2 por ciento de la población regional. No obstante, en Castilla-La Mancha, gracias a la Red de Expertos y Profesionales de Urgencias, es posible saber en cada momento cómo se encuentran los servicios de Urgencias e ir adoptando medidas.

    En estos planes se fijan comisiones diarias de seguimiento lideradas por los equipos directivos de las Áreas Sanitarias, para evaluar la situación y adoptar las acciones pertinentes atendiendo a diferentes fases de activación, basadas en el número de pacientes en urgencias, tanto demandantes de atención cómo pendientes de ingreso.

    El año pasado, durante toda la campaña de la gripe se pusieron en funcionamiento cerca de 300 camas adicionales. El Plan contempla también el rediseño de algunos circuitos intrahospitalarios, favoreciendo la liberación de camas, mediante la realización de pre-altas y petición programada de las ambulancias, agilizando la habilitación de las camas libres. Igualmente se definirán espacios intrahospitalarios específicamente para favorecer la espera de ambulancia del paciente en zonas de tránsito.

    Asimismo, y si fuera necesario, Sanidad prevé el refuerzo de la programación de altas durante los fin de semana para garantizar que todos los pacientes que clínicamente están en disposición de recibirla, puedan marcharse a casa.

    Otras de las medidas recogidas en el Plan es la creación de protocolos de priorización de pruebas complementarias e interconsultas intrahospitalarias, con el fin de disminuir la estancia media hospitalaria de los pacientes y favorecer un óptimo índice de ocupación en los mismos. Durante los periodos de mayor incidencia de la gripe, y si fuera necesario, los hospitales desarrollarán preferiblemente programas encaminados a potenciar la Cirugía Mayor Ambulatoria.

    La campaña de vacunación se inició el pasado 2 de noviembre y se prolongará hasta finalizar el mes de diciembre. Castilla-La Mancha ha invertido este año 991.848 euros para la adquisición de un total de 330.000 dosis de vacunas.