• Más de 80 euros por un dolor de cabeza y 57 por una diarrea

    oxigeno

    El oxígeno, también presente en los centros de salud, es un tratamiento común contra el dolor de cabeza.

    Un dolor de cabeza, 82 euros; una diarrea, 57 euros; vértigos, 218 euros o un marcapasos, 3.880 euros. Estos son los precios hasta los que está dispuesto a llegar el Sistema Público de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) a la hora de derivar pacientes a la sanidad privada. Desde hace 16 años, la Ley 8/2000 de 30 de noviembre permite al Sescam convenios para prestar servicios sanitarios con medios ajenos. Pero este recurso tiene unos precios que ya están publicados en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha.

    Todo está estipulado, desde radiografías que no llegan a 30 euros hasta complicadas intervenciones como una reducción de estómago, por las que el Sescam, en caso de derivar al paciente, pagaría 4.146,13 euros. Y es que es obligatorio hacer públicos todos los precios, desde los de consultas externas hasta rehabilitación, logopedia, cirugías o reproducción asistida.

    La sanidad privada está prevista como uno de los recursos para aliviar las listas de espera. Así, el año pasado se derivaron más de 7.900 procedimientos quirúrgicos y el presupuesto público para sanidad privada llegó a superar, en 2011, los 200 millones de euros.

    Está esteblecido todo, desde el precio del tratamiento en consultas por una diarrea, que es de 57 euros, hasta un dolor de cabeza o una subida de tensión, por cuya atención se pagarían 225 euros.

    En el caso de la fecundación in vitro, el Sescam asumiría 290 euros por la estimulación ovárica, 490 euros por una punción, 1.060 euros por la fecundación y 871 por la transferencia embrionaria.

    Entre los casos que no pueden esperar estaría un marcapasos, por el que se pagaría un máximo de 3.880 euros. No obstante, el Sescam también cobraría si se diese el caso contrario, es decir, que la sanidad privada derivase a un paciente a sus consultas u hospitales.

    Desde que el Gobierno regional cogió las riendas de la sanidad, la Ley 8/2000 de 30 de noviembre permite al Sescam convenios o conciertos para prestar servicios sanitarios con medios ajenos. Como ya publicara Diario Sanitario en mayo, Toledo y Albacete son las provincias que más procesos quirúrgicos derivan a la sanidad privada, con más de 3.000 intervenciones anuales cada una. Frente a estas cifras, Ciudad Real no derivó ningún caso el año pasado, Alcázar de San Juan mandó 676 pacientes a los quirófanos de la sanidad privada, Cuenca llevó a 235 y Guadalajara a 477.