• Médicos con cuentakilómetros

    buscuadradaMás de 3.000 kilómetros al mes, más de cinco horas a la semana metidos en un autobús y más de 5.000 euros invertidos en la carretera. Esto es lo que les ha costado a los médicos especialistas el desplazamiento “forzoso” al Hospital de Almansa. Desde enero de 2013, más de una treintena de facultativos está pagando un autobús que recorre a diario los 75 kilómetros que separan Albacete de Almansa. La misma historia se repite con los especialistas de Villarrobledo, solo que estos se mueven en coches particulares. ¿Qué pasará ahora que la justicia les da la razón?

    De la noche a la mañana pasaron de pertenecer al Complejo Hospitalario de Albacete a convertirse en plantilla “forzosa” de las gerencias (GAI) de Almansa y Villarrobledo. Es decir, de formar parte de la plantilla sanitaria y universitaria de tres hospitales a pertenecer a uno solo. Aquel cambio, no sólo obligó a decenas de especialistas a un único destino, además, el autobús que les pagaba el Sescam cuando tenían que viajar a los pueblos desapareció. En enero de 2013, médicos que vivían y trabajaban en Albacete tuvieron que dar un cambio radical a sus vidas.

    El grupo de Almansa optó por contratar un autobús que sale todos los días, a las siete de la mañana, de Albacete y les cuesta 120 euros al mes por pasajero. La plantilla de Villarrobledo no encontró una empresa de transporte que se amoldara a su situación y, como los maestros, hace la rueda. Es decir, cada semana conduce uno, que pone el coche, y pagan el combustible entre todos.

    Tres años después, estos médicos han invertido más de 5.000 euros, cientos de miles de kilómetros y cientos de horas en la carretera. Eso sí, ahora tienen una baza para cambiar su situación. La Justicia les ha dado la razón, sus plazas están adscritas a Albacete.

    Unidos bajo las siglas de Afesalba, la Asociación de Facultativos Especialistas de Albacete, estos médicos no quieren fallar a sus pacientes, pero tampoco renunciar a sus derechos. Podrían haber exigido que se ejecutara la sentencia por las bravas el pasado 22 de septiembre. No acaban de confiar en sus nuevos interlocutores políticos. No obstante, quieren encontrar una solución que no perjudique a nadie.