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Mercedes Tárraga vivió una pesadilla como técnico en cuidados de enfermería (TCAE) en Albacete. Cuando regresaba a su casa, le costaba borrar las imágenes de pacientes ahogándose o del ir y venir constante de la funeraria por los pasillos del Hospital Perpetuo Socorro. Para evadirse, decidió pintar. Ahora, expone hasta el 16 de agosto en la sala Aurora García de Alpera (Albacete).
La TCAE Mercedes Tárraga expone en Alpera las obras que pintó en confinamiento
La TCAE Mercedes Tárraga trabaja en el Hospital de Día del General de Albacete, pero, de la noche a la mañana, éste se transformó en una improvisada UCI para atender a los pacientes COVID más graves. Así, ella acabó administrando los tratamientos de los pacientes en el Hospital Perpetuo Socorro.
En su ir y venir por los pasillos no dejaba de ver pacientes ahogándose, sufriendo, mientras los de la funeraria no daban la entrada con la salida. Así, mientras sus padres y sus hijos se confinaron en Alpera, ella, por no contagiarlos, se quedó en Albacete, pero no dejaba de angustiarse pensando en que su familia acabara entre esos pacientes.
Alumna de pintura de la Universidad Popular desde hace más de diez años, decidió que el tiempo libre en confinamiento lo iba a pasar pintando. Y es que el pincel era la única herramienta que le permitía evadirse, desconectar de lo que vivía en su día a día en el trabajo. Mercedes Tárraga pintó en lienzo, en cartones, en cajas de leche y en todo lo que conseguía. Pintó sesenta obras, desde bodegosnes con la fruta que tenía en su casa hasta cajas de fármacos y, al final, cuando ya veía la luz, marinas.
Ahora, esta pintora aficionada ha recuperado toda la obra y la ha organizado en un diario que expondrá en la sala Aurora García de Alpera hasta el 18 de agosto. La muestra, con todas las medidas de seguridad que marca el contexto del coronavirus, se puede ver de 7 a 9 de la tarde.
