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En Castilla-La Mancha ya solamente hay este año un cinco por ciento más de fallecimientos que en 2019, antes de la pandemia sanitaria del Covid, que disparó las muertes en la región. De hecho, en las primeras 38 semanas de 2021, hay un 22,52% menos de fallecidos que en el mismo periodo de 2020. La primera ola de la pandemia del Covid se cebó con la región.
Los datos aparecen recogidos en el informe Estimación del número de defunciones semanales (EDeS) durante el brote de covid-19. Actualizado hasta la semana 38, lo acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE). Se trata de un informe que empezó a elaborar con la pandemia. En él se indica que no todas las muertes son atribuibles al Covid. Pero sí se considera necesario hacerlo, puesto que la pandemia disparó los fallecimientos en todo el país.
Por provincias, Cuenca deja el mejor dato, puesto que este año tiene incluso un 17% menos de muertes que en 2019. Guadalajara tiene un 2,9% más de muertes que en la prepandemia. Toledo, por el contrario, tiene todavía un 10% más de muertes, seguida de Albacete, con un 9,9% más de fallecimientos que en 2019. En Ciudad Real hay un 7,8% más.
Mejoran los datos en un año
Respecto a los datos de 2020, la mejoría es muy notable en todas las provincias de Castilla-La Mancha. Cuenca, de nuevo deja el mejor dato. Aquí, las muertes han bajado casi un 39% en un año. En Guadalajara, más del 26% y en Ciudad Real casi el 24%.
En Albacete hay un 21% menos de fallecimientos que en 2020 y en Toledo el descenso es del 14% en el último año.
En total, en las primeras 38 semanas del año han fallecido en la región 15.252 personas. Supone un descenso general del 22,5% en un año y del 5,33% sobre 2019. La región se acerca así a las cifras prepandemia.
