Fieles a nuestro lema, frente al sedentarismo, senderismo, los andarines de Diario Sanitario nos aventuramos a una ruta de 7,6 kilómetros, con subidas y bajadas, en Navajuelos, entre los pueblos albaceteños de Pozo Cañada y Tobarra, para alcanzar el punto geodésico de Entresierras. Con el romero en flor, entre pinos y esparto, hacemos una ruta, para nuestra sorpresa, rodeados de jabalíes.
✔Andarines: Manuel Martínez, Rigoberto López, Juan Antonio González, Cesárea Arnedo y Dolores Carcelén
✔Aquí puede consultar la ruta en Wikilock
- Distancia: 7,62 km.
- Desnivel: 313 m.
- Tipo de ruta: circular.
No conseguimos que El Bardo, que dotaba de genialidad la redacción de estas rutas, escriba palabra alguna, pero Manuel, nuestra brújula, sí está a pleno rendimiento, por lo que, una semana más, el mes de octubre nos regala una temperatura envidiable. En esta ocasión, se dan las condiciones óptimas para avistar los ‘navajos’ o charcos que dan nombre al paraje de Navajuelos.
El objetivo es el punto geodésico de Entresierras, a 973 metros de altitud, pero acabaremos caminando más allá, hasta una formación rocosa con unas vistas increíbles. Podemos admirar hasta el Madroño mientras recordamos las rutas al Picorrón o la reciente Sierra del Tomillo. Nos sorprende lo verde que está la zona entre Tobarra y Pozo Cañada en los inicios del Otoño.
También divagamos, mientras subimos, no sin esfuerzo por el calor, sobre aquella época en la que se iba en tren a Tobarra, pasando por la pequeña caseta de Navajuelos, aún en funciones. Entre resuello y resuello, nos explica nuestro andarín Terto, en huelga redactora, que el nombre de la zona se la debemos a los navajos, a las pequeñas lagunas que vemos desde arriba cómo sortean el paisaje.
Como cabras y acompañados de jabalíes
Al tiempo que a una de nuestras asiduas le da la pájara de rigor, ascendemos pegados a una valla. Nos sorprende un jabalí a la carrera en pleno descenso, hasta el punto que tememos que se lleve por delante a los rezagados. Y lo que más nos llamará la atención es que, una vez arriba, vemos un nuevo jabalí.
En definitiva, una tarde más, llena de sorpresas, en este caso en Navajuelos, que rematamos en Pozo Cañada, cenando de cine en Donna Donna, donde nuestro bardo celebra un cumpleaños más. Planean las jubilaciones y esperemos que con ellas nuevas rutas.
Equipo de Donna Donna, en Pozo Cañada.