
Reacción de cuatro sociedades médicas ante el anuncio de nuevas especialidades MIR: Urgencias y Emergencias y Enfermedades Infecciosas
Las cuatro sociedades médicas abajo firmantes -SEMI, SEMFYC, SEMERGEN y SEMG-, ante las últimas manifestaciones hechas públicas en sede parlamentaria por el Ministro de Sanidad, Salvador Illa, sobre la posible creación de nuevas especialidades MIR (Urgencias y Emergencias y Enfermedades Infecciosas) que podría contemplar el nuevo Real Decreto de Formación Sanitaria Especializada (FSE) en el que trabaja actualmente Sanidad, manifiestan lo siguiente:
- Los médicos de familia e internistas que firman este comunicado, junto con otras especialidades médicas, han atendido a una inmensa mayoría de los pacientes con COVID-19 en nuestro país, dando una respuesta asistencial ejemplar y eficiente. Durante la crisis sanitaria del coronavirus se ha demostrado la importancia de contar con médicos especialistas polivalentes y la importancia del trabajo en equipos profesionales multidisciplinarios, centrados en las necesidades del paciente. Este modelo de atención integradora y transversal será cada vez más necesario para dar respuesta a los desafíos actuales del sistema sanitario como las pandemias de cronicidad y de pluripatología.
Más fragmentación
- Estamos a favor del reconocimiento profesional y la ordenación docente de nuevas áreas del conocimiento médico a través de la creación de subespecialidades médicas o Áreas de Capacitación Específicas (ACE), siguiendo el modelo formativo de la mayoría de los países de nuestro entorno. Entendemos que la creación de nuevas especialidades como la de Urgencias y Emergencias ─u otras como la de Enfermedades Infecciosas─ supondrá más fragmentación del sistema sanitario y una mayor rigidez en su estructura organizativa y funcional que dificultarán la respuesta de nuestro sistema a las futuras crisis sanitarias.
No hay consenso
- Consideramos que no existe un criterio científico que sustente la necesidad de la creación de estas nuevas especialidades y no existe, en absoluto, un consenso en la comunidad médica y científica sobre este respecto. Por tanto, entendemos que existe una falta de justificación científica que motive la decisión de crear estas especialidades.
