
Mucho ha llovido desde que nos reuniera la doctora Rueda en el Hospital General de Albacete, coordinando a un grupo de médicos rurales y urbanos, sensibilizados por el tema, para hablar y hacer un protocolo sobre la prevención de las amputaciones en el diabético. Caminábamos por los años 90, cuando dado la alta incidencia de amputaciones en nuestra provincia se plantea la prevención. Con un objetivo, reducir las amputaciones al 50 % en nuestros diabéticos para el año 2000.

Planteamientos de exploraciones específicas, revisiones periódicas , educación para la prevención, consejos en los cuidados del pie y control de la glucemias, formaban una parte de los planteamientos en el objetivo marcado. También buscábamos colaboradores externos al sistema, como los podólogos, e intentamos que se integraran como profesionales de gran importancia en la prevención.
Recuerdo que en 2008, en Tomelloso, se hizo una Jornada sobre podología diabética, la primera en Castilla-La Mancha, y que allí hablamos sobre la importancia del abordaje integral del pie diabético. Fue el entonces consejero, Dr. Sabrido, quien destacó la importancia del tema, siendo Castilla-La Mancha la primera comunidad autonómica en ofrecer atención podológica gratuita a los pacientes diabéticos, formando parte de las prioridades en la prevención, el tratamiento, la rehabilitación y la investigación de las e enfermedades crónicas de los castellanomanchegos.
Mucho ha llovido y estos días me encuentro con la noticia de que estos convenio están en el aire.
El riesgo de amputación afecta a un grupo de población muy vulnerable
¿Alguien ha sido capaz de pensar que la atención a este grupo de pacientes es fundamental por múltiples razones? Pero hay una clave. Es un grupo de población muy vulnerable. Son personas mayores, de reducida movilidad, de bajos ingresos económicos y pluripatológicos.
Sobre 9.000 tratamientos podológicos gratuitos se han ofrecido en nuestra comunidad el año 2018, de los cuales 2.600 corresponden a la provincia de Albacete.
¿Alguien ha calculado lo que supone el gasto de una úlcera plantar en un diabético?
La educación que recibe durante el acto de tratamiento tiene una transcendencia incalculable, si pensamos en términos económicos. No sólo callos y cortar uñas, sino que los podólogos actúan en áreas del pie que a veces los propios pacientes son incapaces de verse.
Son 100.000 euros el coste de disponer de un servicio gratuito para dos revisiones anuales de los pies en los diabéticos.
Estamos hablando de varios millones de euros en ahorro
Estamos hablando de varios millones de euros en ahorro por las consecuencias de no revisar oportunamente a estos pacientes. Sí o sí a la necesidad de concertar con los podólogos en sus reivindicaciones por las consecuencias de un futuro muy cercano.
El pie diabético es responsable del 50% de las amputaciones en el adulto
El pie diabético es una enfermedad compleja, posiblemente responsable del más del 50% de las amputaciones realizadas en el adulto.
Conlleva un deterioro, una gran carga hospitalaria, por lo que suponen las infecciones, úlceras o destrucción de los tejidos profundos del pie asociado con neuropatía o enfermedad arterial periférica en las extremidades inferiores de personas diabéticas.
Evidencias para prevenir amputaciones
Estrategias de prevención, educación a pacientes, tratamientos multidisciplinario de las úlceras, reducen más del 50% de las amputaciones. Todo esto no es una iluminación de una tarde de invierno del que suscribe el artículo. Fueron 14 instituciones europeas especializada en pie diabético las que crearon un grupo de estudio en esta materia, EURODIACE, en 2003, demostrando con estudios científicos todo lo escrito.
Es tan importante este tema que en agosto del 2013 mereció un editorial en la revista Endocrine (volumen 44, Issue 1, pp3-4) de la Universidad de Roma, departamento de Medicina Interna, titulado: “Prevención de la úlcera del pie diabético: nuevas evidencias de un viejo problema”, que concluye afirmando que el seguimiento estricto conducido por un equipo que pueda garantizar educación específica, cuidados intensivos de podología y el uso de órtesis y zapatos puede reducir la incidencia de úlceras en el pie diabético.
No dejemos de atender este problema de la mano de los profesionales que tanto necesitamos para un mejor futuro de los pacientes diabéticos.
gracias