• Objetivo: evitar las caídas en personas mayores

    Un tercio de los mayores de 65 años y la mitad de los mayores de ochenta se caen, al menos, una vez al año. Profesionales de Atención Primaria de Albacete han iniciado el proceso para implantar la Guía de Buenas Prácticas Clínica (GBPC) “Prevención de caídas y lesiones derivadas de las caídas”. De hecho, ya se ha constitutido el grupo de trabajo que llevará a cabo esta implantación.

    La iniciativa forma parte del Programa de Centros Comprometidos con la Excelencia en Cuidados y aúna un equipo multidisciplinar de 30 profesionales de Atención Primaria en el que se cuenta con médicos, enfermeros, fisioterapeutas, trabajadores sociales y residentes en Medicina y enfermería familiar y comunitaria.

    El objetivo, siguiendo el testigo del grupo ya consolidado en el Complejo Hospitalario Universitario de Albacete (CHUA), es la prevención de la caída, actuando sobre la población de riesgo. Para ello, se adaptarán al ámbito de la Atención Primaria y a los recursos existentes, una serie de intervenciones, basadas en la última evidencia científica disponible y que han demostrado ser efectivas en la prevención de caídas en la comunidad.

    Con la implantación de esta guía de buenas prácticas se pretende identificar y actuar sobre los factores de riesgo de caídas en la población, reducir su incidencia y disminuir las caídas que producen lesión.

    Contará con el apoyo de Victoria Ruiz, coordinadora de la implantación de las GBPC en Albacete y Ana Isabel Alcañiz, líder del grupo de caídas en el CHUA, así como con el asesoramiento científico de Pilar Córcoles Jiménez, supervisora de investigación.

    Las caídas son un importante problema de salud pública. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), son la segunda causa mundial de muerte por lesiones accidentales no intencionales, estimándose que se producen 424.000 caídas mortales cada año.

    Aproximadamente, un tercio de las personas mayores de 65 años y la mitad de los mayores de 80 años se caen al menos, una vez al año. De los mayores que se caen, la mitad tienen caídas recurrentes y el 50% se vuelven a caer en el mismo año. La caída es, por tanto, un factor de riesgo de sufrir nuevas caídas. Además, más de un 70% de las caídas en personas mayores tienen graves consecuencias (fracturas, heridas, esguinces, contusiones…) y más de la mitad presentan secuelas posteriormente.

    A largo plazo, la autonomía de las personas mayores que se caen disminuye por el miedo a volver a caer y por la dificultad para recuperar el nivel funcional previo, derivando en discapacidad y en ocasiones, en institucionalización.

    Esta iniciativa forma parte del Programa de Centros Comprometidos con la Excelencia en Cuidados, iniciada en España en el 2011, gracias a la colaboración entre la Unidad de Investigación de Cuidados de Salud (Investén-isciii), el Centro Colaborar Español del Instituto Joana Briggs para los cuidados en Salud basados en la Evidencia y la Asociación Profesional de Ontario (RNAO).