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El resto de las variantes apenas suponen un 0,9% de los casos
Delta cede terreno a la variante COVID Ómicron en Castilla-La Mancha, como ocurre en el resto de España, pero incluso a más velocidad que en otras autonomías. Es más contagiosa y reduce la efectividad de las vacunas, pero el Ministerio de Sanidad considera que desencadena menos infecciones graves. «Los estudios preliminares apuntan a una mayor transmisibilidad y un mayor escape inmune, aunque parece que el grado de protección frente a infección grave en personas convalecientes y vacunadas es alto», dice el último informe al respecto.
Más de la mitad de las PCR que se analizan aleatoriamente ya son Ómicron en Castilla-La Mancha
Predominante hasta diciembre de 2021, en estos momentos Delta está siendo desplazada por la variante Ómicron. Como ocurriera con Alfa, cada variante es más contagiosa que la anterior.
Y es que Ómicron presenta más de 30 mutaciones en el gen S, varias de ellas relacionadas con un incremento en la transmisibilidad y el escape a la inmunidad. Así, las primeras evidencias indican un escape a la inmunidad y una transmisibilidad mayor que para Delta.
Mediante la secuenciación de muestras aleatorias, en la semana del 13 a 19 de diciembre el porcentaje de muestras de la variante Ómicron se situaba en 42,9% en España. Y prueba de que la pugna está entre Ómicron y Delta, reside en que el resto de variantes del virus se mantienen en niveles muy bajos de circulación. En las últimas cuatro semanas las otras variantes, en conjunto, alcanzan el 0,9% del total.
De momento, la presencia de Ómicron en Castilla-La Mancha es mayor que en Andalucía, Cataluña o Extremadura y algo menor que en Madrid, pero, al ritmo actual, es previsible que sea la variante dominante en toda España en cuestión de días.
