Castilla-La Mancha sigue a la espera de contar con unidades de cuidados paliativos pediátricos en las cinco provincias, pero cuando estos inicien su andadura lo deberán hacer completos, es decir, con apoyo psicológico, espiritual y social del paciente y su familia. De hecho, veinticinco líderes clínicos se han unido, en colaboración con la Fundación Dignia y la Fundación Pía Aguirreche, para promover la figura del counseling o acompañante espiritual al final de la vida.
El Foro Iberoamericano de Espiritualidad en Clínica (FIEC) surge como expansión internacional del Grupo de Espiritualidad de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL), artífice de un modelo de acompañamiento que cumple ahora 20 años.
A pesar de que en estas dos décadas se ha asistido a un despertar progresivo del interés y necesidad de profundización, el grupo de expertos internacionales está de acuerdo en que “acompañamiento espiritual no constituye aun una práctica sistematizada en los equipos de cuidados paliativos y en la mayoría de ellos no existe una figura específica para esta tarea”.
Los expertos, que han trabajado en grupos durante los 9 meses previos a este encuentro, anuncian el desarrollo de cuatro cursos de formación sobre acompañamiento espiritual al final de la vida.
También han redactado un manifiesto que reafirma el valor integral y la dignidad del ser humano, abogando por una atención clínica en el plano espiritual que reconozca y alivie el sufrimiento al final de la vida.
Acompañamiento
Destacan la importancia de la espiritualidad como un elemento universal y humanizador en la atención médica, promoviendo la formación y el autocuidado de los profesionales para mejorar su capacidad de acompañamiento espiritual.
Además, los expertos se comprometen en él a seguir desarrollando programas educativos, investigaciones y estrategias que integren ciencia y espiritualidad, y a fomentar un enfoque holístico en la gestión del sufrimiento y el cuidado paliativo.
“La espiritualidad es algo universal e intrínseco al ser humano”, destaca el Dr Enric Benito, oncólogo, figura de referencia en este ámbito, y uno de los partícipes del encuentro. “El modelo de acompañamiento espiritual da un sentido específico al sufrimiento y al fenómeno de abandonar este mundo, más allá del hecho biológico, por lo que el papel en el acompañamiento de la persona que sufre ha de equipararse al plano médico o psicológico”.
Un trabajo que comenzó hace 20 años
La Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL), creó el Grupo de Trabajo de Espiritualidad (GES) en 2004, orientado a explorar, entender e integrar el sufrimiento y la espiritualidad en el entorno clínico y académico. Su objetivo era: “Promover entre pacientes, familiares y profesionales la oportunidad de transformar el proceso de morir en una experiencia compartida de crecimiento personal y de toma de conciencia de nuestros recursos y necesidades espirituales”.
A través de la revisión bibliográfica, la integración de las tradiciones de sabiduría, y la experiencia clínica se elaboró una aproximación humanista, profesional y transconfesional y se publicó como Modelo SECPAL de Acompañamiento Espiritual.