
Un 65% de las personas que sufre una fractura osteoporótica no ha sido diagnosticada previamente de osteoporosis (OP), según el “Observatorio de la Osteoporosis”, de la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas (FHOEMO). Por ello, la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) solicita a las instituciones que incorporen a esta patología en las Estrategias y Planes de Salud como una enfermedad crónica. Y desarrollen modelos de atención para un diagnóstico temprano.

En este sentido, con el fin de concienciar a la sociedad sobre la importancia de seguir una serie de recomendaciones para mantener una buena salud ósea, la sociedad científica, en el marco de la campaña ‘12 meses en Endocrinología y Nutrición, 12 pasos hacia la salud’, dedica el mes de octubre al Grupo Metabolismo Mineral y Óseo. Lo hacen con motivo del Día Mundial de la Osteoporosis, que se celebra el próximo 20 de octubre.
La osteoporosis es una enfermedad asintomática, ya que se manifiesta por la aparición de fracturas. Por ello, es esencial realizar un adecuado diagnóstico y tratamiento para reducir el riesgo de fracturas osteoporóticas (vertebrales, de cadera, de hombro o de muñeca, principalmente).
Menopausia
Aunque la osteoporosis más frecuente es la que se produce después de la menopausia, puede afectar también a los hombres. Además, la prevalencia aumenta progresivamente con la edad, afectando al 80% de las mujeres mayores de 80 años, por lo que el actual envejecimiento progresivo de la población supone un agravamiento del problema. “En menor medida, la osteoporosis puede afectar a personas de ambos sexos menores de 50 años siendo más frecuente encontrar alguna enfermedad de base que provoque la enfermedad”, puntualiza la Dra. María Cortés Berdonces, coordinadora del Grupo Metabolismo Mineral y Óseo de la SEEN.
La importancia de la prevención
Los especialistas consideran fundamental concienciar a la sociedad sobre la importancia de la prevención, ya que esta se basa principalmente en mantener una buena salud ósea. Además, debe comenzar en edades tempranas para conseguir alcanzar una buena calidad de masa ósea durante el desarrollo del esqueleto y en la vida adulta.
En este sentido, la endocrinóloga expone algunas medidas para prevenir la osteoporosis como el consumo adecuado de calcio y vitamina D y realizar actividad física evitando la inmovilización prolongada. Asimismo, aconseja controlar algunas enfermedades que se asocian al desarrollo de osteoporosis como la artritis reumatoide, el hipogonadismo, el hiperparatiroidismo e hipertiroidismo, la anorexia nerviosa, la diabetes, la malabsorción y las enfermedades malabsortivas, entre otras, y vigilar o eludir, en la medida de lo posible, fármacos que favorezcan el desarrollo de la enfermedad, así como el alcohol y el tabaco.
Por otra parte, para el abordaje adecuado de la osteoporosis es fundamental promover la investigación para identificar factores de riesgo específicos y grupos poblacionales que se puedan beneficiar de intervenciones personalizadas. Asimismo, la endocrinóloga aboga también por promover campañas a nivel nacional y regional para concienciar a la población sobre la prevención de la osteoporosis y, sobre todo, de las fracturas derivadas por esta enfermedad.
Abordaje multidisciplinar
“La osteoporosis debe tener un abordaje multidisciplinar, ya que puede precisar desde un tratamiento rehabilitador, un apoyo en actividad física o nutricional hasta una unidad del dolor en los casos de fractura”, manifiesta la Dra. Cortés. Entre estos profesionales se encuentran los endocrinólogos, especialistas en metabolismo mineral y óseo, con un papel vital en la prevención, diagnóstico y tratamiento de los pacientes con osteoporosis.
En cuanto a los avances que se están produciendo en el ámbito de la osteoporosis, cabe destacar que se están instaurando programas que promueven la realización de unidades de prevención secundaria de fractura osteoporótica en los hospitales, así como tratamientos más potentes para prevenir las fracturas osteoporóticas.
En relación a los desafíos, se encuentran un diagnóstico precoz de la osteoporosis, antes de que ocurra la primera fractura, y poder implementar un tratamiento de todas las personas con una primera fractura osteoporótica con el fin de prevenir segundas fracturas.