• Una historia de piratas para no temer al quirófano

    Los anestesistas han encontrado la fórmula para que los niños entren al quirófano sin miedo, pensando que son piratas, de pañuelo verde hospital, que van a navegar acompañados de su madre hasta el fondo del mar, con una bonita pulsera, una televisión que emite pitidos, pegatinas en el pecho y una luz roja en el dedo.

    piratas quirófano
    Ilustraciones: Olivia Navalón.

    Personal de quirófano ha ideado un cuento y un vídeo que tendrán todos los pacientes pediátricos antes de la operación

    La protagonista se llama Olivia, como la ilustradora, una niña de 11 años

    Para dar forma a esta historia de piratas, un pequeño libro y un vídeo que se entregarán a todos los niños que vayan a entrar en un quirófano, han sido necesarios tres ingredientes: interés, vocación y el talento de la niña Olivia Navalón, de 11 años, que ha sido la ilustradora. Los primeros ingredientes los ha puesto el personal del Bloque Quirúrgico de la Gerencia de Albacete, que no ha parado hasta gestar un cuento para que los niños pierdan el miedo al quirófano.

    De hecho, las supervisoras de quirófano del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, Catalina Segovia y Concepción Liante, y la anestesista Flor García, explicaban este proyecto en las IV Jornadas de Humanización de la Gerencia de Atención Integrada de Albacete (GAI), donde insistían en que la historia de piratas llegará a todos los pacientes en forma de libro y de vídeo, con ilustraciones y pictogramas para niños con dificultades de aprendizaje.

    Para evitar ese ambiente hostil, donde tanto temor infunden la separación de los padres y las agujas, el personal sanitario ha pensado que la clave está tanto en que la madre esté, también vestida de “pirata”, hasta el último momento, como en que el niño sepa que le van a poner una pulsera, pegatinas en el pecho, una luz roja en el dedo o una mascarilla.

    piratas quirófano

    Y es que para el personal sanitario que trabaja en quirófano la verdadera aventura, el tesoro de esta historia de piratas, no es otro que conseguir que los niños se duerman contentos. Para ello, se ha cuidado hasta el último detalle, ya que los pictogramas del cuento los ha supervisado la maestra Carmen Molina y el vídeo contará con lenguaje de signos para que las personas sordas también puedan entender esta historia de piratas.

    También le puede interesar:

    Varitas “antimiedo”, la magia que exportó Cepillo

    Comentar

    Su dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos necesarios están marcados *

    *