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El Colegio Oficial de Podólogos de Castilla-La Mancha ha impartido en Toledo un curso de especialización para colegiados centrado en Dermatología y Pediatría. El evento contó con más de una veintena de asistentes.
Esta formación ha corrido a cargo de dos podólogos expertos en la materia. Se trata de Javier Alcalá Sanz, diplomado en Podología por la Universidad de Sevila, y experto en cirugía del pie y tobillo por la UCLM. Así como la doctora Marta Vinyals Rodríguez, podóloga pediátrica de Barcelona, profesora asociada de la Universidad de Barcelona. Y coordinadora de postgrado del Método Ponseti de la Universidad de Barcelona.
En el curso se abordaron algunas patologías frecuentes en las consultas de podología infantil, como las infecciones por el virus del papiloma humano en el pie, los últimos avances en genética y su diagnóstico. Y diferentes alternativas de tratamiento. Todo ello, con un enfoque práctico, para que los profesionales participantes puedan aplicar esta actuación de conocimientos a su consulta, y adaptarse así a diferentes presentaciones clínicas de verrugas plantares que ven habitualmente.
Una patología muy común
Marta Vinyals señaló que las verrugas plantares son una patología muy prevalente “que vemos a diario en las consultas de podología, ya que afectan a todas las edades”.
Vinyals Rodríguez expuso que para el abordaje de esta patología se utilizan diferentes terapias y tratamientos. Unas menos invasivas y otras que precisan de una mínima intervención con anestesia para su eliminación, lo que se conoce como legrado quirúrgico. También existe un tratamiento mediante inmunoterapia. “Ofrecemos diferentes alternativas terapéuticas para adaptarnos a la gran variabilidad de presentaciones clínicas que nos encontramos habitualmente”.
Teniendo en cuenta que la podología pediátrica aborda un vasto campo de conocimiento, otro de los temas centrales de este curso ha tenido como objetivo las enfermedades de origen neurológico durante el crecimiento. De esta forma, se ha ofrecido a los participantes diferentes estrategias de diagnóstico y las opciones de tratamiento más actualizadas.
En este sentido, los ponentes expusieron la necesidad de realizar una valoración individualizada de cada caso, y no centrarse tanto en la patología que el momento presenta el paciente. “La exploración neurológica es un proceso dinámico en función de la maduración y la colaboración del paciente, por lo que se requiere flexibilidad y observación directa por nuestra parte. El conocimiento, experiencia, saber qué pruebas complementarias se requieren en cada caso y el seguimiento del paciente nos ayudará a la confirmación de datos y a un mayor manejo y éxito en nuestro tratamiento”.
