
La Unidad Militar de Emergencias levanta un dique
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha activado un plan de contingencia en el Hospital Nacional de Parapléjicos, ante la previsión de lluvias y la posible crecida del Tajo. No se descarta el traslado de pacientes, aunque la Unidad Militar de Emergencias (UME) ha levantado un dique para contener el agua. El director gerente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), Alberto Jara, ha querido transmitir este viernes un mensaje de tranquilidad



La situación obliga a un plan de evacuación
Este plan incluye un protocolo específico para la evacuación de las áreas más sensibles del centro. Como la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), los quirófanos, la cocina, la farmacia y el área de informática. Todas ellas están situadas en la planta baja. Y son susceptibles de verse afectadas por una potencial inundación.
No obstante, se han colocado barreras de contención que ha supervisado la Unidad Militar de Emergencias, a quien el Hospital ha agradecido su colaboración.
Así, la semana pasada, cuando se produjo un aumento en el nivel del río Tajo debido a la liberación de agua de los embalses, la dirección del Hospital Nacional de Parapléjicos, en coordinación con los equipos de Mantenimiento y Servicios Generales, ya activó una estrategia de actuación ante una potencial inundación. En todo momento, el Hospital ha estado en contacto con el servicio de emergencias 112.
El plan de contingencia está diseñado en dos vertientes. Por un lado, la observación continua del ascenso de los niveles del río y la contención del agua. Por otro lado, la ejecución del protocolo de evacuación de las unidades y servicios localizados en la planta baja, con especial atención a la UCI.

Se ha elevado a plantas superiores parte del material
En este sentido, la dirección del Hospital ha preparado la Unidad de Pacientes Semi Críticos para acoger a aquellos que pudieran necesitar traslado, asegurando el equipamiento necesario para su atención. Además, se ha procedido a elevar a plantas superiores todo el material susceptible de ser dañado por el agua, como equipos electrónicos.
Todas estas acciones se han llevado a cabo de manera preventiva, ya que esta mañana el nivel del agua del río Tajo se mantenía por debajo de los niveles alcanzados la semana pasada. Sin embargo, ante la nueva alerta meteorológica, el centro ha reactivado la estrategia para garantizar una respuesta rápida y eficaz en caso de que la situación lo requiera.
La dirección del Hospital Nacional de Parapléjicos, en estrecha colaboración con el 112, ha informado de que permanecerá atenta para responder adecuadamente a cualquier contingencia derivada de esta situación meteorológica.
La delegada del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, ha visitado el Hospital Nacional de Parapléjicos, en Toledo, donde se ha desplegado la UME para construir un dique de contención ante la posible crecida del río Tajo en las próximas horas. Y así evitar que el agua anegue algunas de las instalaciones del centro sanitario, que está muy pegado al río.
Previsión ante las crecidas
Milagros Tolón, en compañía del teniente general Alfonso Arribas y otros mandos de la UME, ha visitado la zona y ha atendido a los medios de comunicación, a quienes contaba que, efectivamente, “esta mañana he solicitado al Ministerio de Defensa que nos enviara ayuda tras la petición realizada por los responsables del PRICAM (Plan de Inundaciones de CLM). Y la UME, horas después, ya está en Toledo trabajando para construir un muro de contención de entre 300 y 500 metros de longitud para evitar la entrada del agua en el hospital, ya que nos encontramos en una zona donde el río sigue creciendo”.
La delegada del Gobierno ha destacado “el trabajo coordinado con la Junta de Comunidades, que es quien dirige la emergencia, y con los ayuntamientos cuyas zonas pueden estar afectadas”.
Entre 60 y 80 efectivos
Milagros Tolón incidía en “dos condicionantes importantes: uno, la lluvia que está cayendo; y dos, las posibles crecidas por el deshielo ante la subida de las temperaturas. Pero estamos preparados. Prevención y precaución, eso es lo más importante”.
La UME ha desplegado junto al Hospital de Parapléjicos “entre 60 y 80 efectivos, porque depende de lo que se necesite en cada momento. Si hacen falta más recursos, vendrán”.
Además de la construcción del muro, “habrá un retén permanente de la UME que se quedará y estará vigilante ante las posibles crecidas. Y veremos en las próximas horas si este muro de contención hay que duplicarlo o es suficiente con el que están construyendo”.