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Desde septiembre de 2021, las agencias europeas de salud pública y seguridad alimentaria han puesto la lupa en los huevos españoles ante brotes de salmonela que han provocado veinticinco hospitalizaciones y dos muertes.
- ¿Qué debe hacer el consumidor? Si hubiese salmonela en un huevo, estaría en la cáscara, de ahí la importancia de manipularla evitando la contaminación cruzada. Raúl Sánchez Guerra, veterinario especialista en seguridad alimentaria, recomienda tener los huevos siempre en el frigorífico y tratar de que la cáscara no entre en contacto con nada. También se pueden lavar los huevos, poniéndolos debajo del grifo antes de manipularlos, pero justo antes, ya que si se lavaran y se guardaran perderían la capa de cera que impide que la salmonela u otros patógenos penetren en el interior.
- Lavarse las manos antes y después de manipular los huevos también es fundamental, pero no sólo ahora que hay una alerta alimentaria. De hecho, la salmonela, aunque menos presente, siempre ha estado ahí.
- Presente en los animales, fundamentalmente en las aves y en productos derivados como el huevo, la salmonela es una bacteria que provoca salmonelosis, una intoxicación alimentaria que causa náuseas, vómitos, fiebre, diarrea y dolor de cabeza.
La clave de los brotes, que han provocado dos muertes, estaría en granjas dedicadas a la producción de huevos
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha publicado un informe en el que se remonta al 2 de septiembre de 2021, cuando Francia notificó un aumento de las infecciones por salmonela, en concreto Salmonella Enteritidis ST11. Así, hasta enero de 2022, se habían notificado 272 casos en Reino Unido, Dinamarca, Francia, Países Bajos, Noruega y España. Estos brotes provocaron la muerte de dos hombres adultos y la hospitalización de 25 personas.
Algunos casos notificados en Francia habían visitado restaurantes que servían huevos distribuidos por un proveedor común. Los huevos procedían de tres granjas españolas, una de las cuales dio positivo para la cepa del brote, de ahí que los huevos de mesa frescos de las granjas vinculadas al brote se retiraran.
No obstante, la EFSA considera que puede haber múltiples fuentes, por lo que la cepa del brote también podría estar circulando en otras granjas, tanto dentro como fuera de España.
En este contexto, las agencias de seguridad alimentaria siguen alerta ante el riesgo de nuevas infecciones por esta cepa de salmonela.
