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El primer miércoles de mayo se celebra el Día Mundial de la Salud Mental Materna. Según la Organización Mundial de la Salud, los problemas de salud mental materna suponen un serio problema de salud pública.
Una de cada cinco madres presenta algún trastorno mental durante el período perinatal, siendo los más frecuentes los trastornos depresivos y de ansiedad.
La Psicología Perinatal es una especialidad orientada a la prevención, el cuidado, el apoyo, el diagnóstico y la intervención psicológica en mujeres y sus familias a lo largo de las diferentes etapas transcurridas durante el período perinatal, el cual comprende las etapas de preconcepción y otras formas de acceso a la maternidad/paternidad (por ejemplo, procesos de adopción), embarazo, parto, posparto y crianza.
Con el objetivo de mejorar la salud mental de las madres, se considera esencial una mirada preventiva que comprenda, no solo la atención psicológica ante la aparición de trastornos mentales, sino el acompañamiento en el camino de la maternidad/paternidad.
Así, se pretenden favorecer los procesos de embarazo, nacimiento, posparto y crianza facilitando el vínculo temprano de forma saludable y el desarrollo óptimo del bebé a lo largo del ciclo vital.
Cinco etapas
Se propone, de este modo, una atención multidisciplinar que tenga en cuenta las necesidades psicoemocionales de las madres y las familias a lo largo de todo el período perinatal y en cada una de sus etapas:
- Preconcepción y deseo. Acompañamiento a través de la facilitación emocional y la adquisición de los recursos necesarios para iniciar el proceso de búsqueda de embarazo u otras formas de acceso a la maternidad/paternidad atendiendo especialmente a dificultades asociadas a problemas como la infertilidad y a procesos médicos de Reproducción Asistida.
- Embarazo. Atención integral ante posibles dificultades psicoemocionales y acompañamiento durante el embarazo considerando esta etapa de enorme interés a nivel terapéutico. En casos de pérdida perinatal, acompañamiento y apoyo durante la etapa de duelo.
- Parto. Preparación psicológica al parto a través de programas específicos y complementarios a los desarrollados en el ámbito sanitario por las matronas como figura de referencia en la atención al parto. Especial atención al miedo al dolor y a la desconfianza hacia el propio cuerpo en relación al proceso de parto.
- Posparto. Apoyo psicológico ante diferentes situaciones como prematuridad, partos complicados, problemas de adaptación, depresión posparto, ansiedad, trastornos de estrés postraumático, etc. y acompañamiento emocional durante esta etapa en la que es común la aparición de emociones de miedo, tristeza, etc.
- Crianza. Promoción del vínculo materno-filial durante las primeras etapas de desarrollo, facilitando la adaptación a los cambios que se producen tras el nacimiento del bebé y el desarrollo de un apego sano y seguro.
La necesidad de una mirada sistémica
La importancia de acompañar a nivel psicológico a las madres y a las familias durante estas etapas es un aspecto clave que se propone como objetivo esencial en los programas de promoción de la salud mental materna. Considerar la necesidad de una mirada sistémica en la que se incluya, no solo a la madre, sino al bebé, a la pareja o al familiar y a la comunidad es otra de las tareas pendientes que pueden ayudar en la prevención de trastornos mentales perinatales.
Desde la psicología perinatal seguimos caminando por lograr que las madres se sientan acompañadas durante sus procesos de maternidad, atendiendo a los problemas que puedan surgir a nivel psicológico y favoreciendo un mejor estado de salud mental para ellas, sus bebés y sus familias.
Cristina Pozo Bardera es psicóloga sanitaria en Psicología Nido, en Toledo. Especialista en salud mental perinatal, terapia familiar sistémica y mindfulness. Docente e investigadora en la Universidad de Castilla-La Mancha.
